Plantas cerradas todo un año, pacientes dados de alta antes de su recuperación... el día día del Arnau de Vilanova

El hospital Arnau de Vilanova está sufriendo los recortes de Toni Comín y ya ha cerrado varias plantas.

De nada sirve aplaudir la gran labor que han realizado estas últimas semanas los servicios sanitarios, cuando luego abandonas a su suerte a los profesionales. El conseller de Salut, Toni Comín, le gusta estar en la foto y salir bien. Lo que no muestra es cómo trata a la sanidad catalana, abandonada desde que ha tomado el cargo.

La Federación Intercomarcal de CGT de Lleida ha criticado los "recortes" en el Hospital Universitario Arnau de Vilanova al asegurar que hay plantas cerradas o que la dirección está intentando cerrar.

El sindicato ha asegurado en un comunicado que se dan altas a pacientes que no están recuperados y que algunos enfermos "vuelven la misma noche o en al día siguiente a urgencias con el consiguiente gasto que conlleva volver a realizar las pruebas diagnósticas".

La CGT afirma que la planta de otorrinolaringología está cerrada todo el año, señala que la de pediatría lo está desde primeros de julio y que la de urología, cerrada desde el 1 de agosto con la previsión de abrirla el 16 de septiembre, se ha tenido que abrir antes por la elevada demanda.

El sindicato remarca que la dirección está bloqueando camas en la planta de traumatología para intentar "cerrar una de las alas" y que en los boxes de urgencias se están metiendo dos camas a pesar de que están preparados solo para una.

La central sindical insiste en que el cierre de plantas conlleva que enfermos de diferentes patologías estén juntos en zonas que no les corresponden lo "que provoca que enfermeros y enfermeras y auxiliares, que siempre han estado tratando un tipo de paciente de una especialidad concreta, tengan que tratar a parturientas, a pacientes de urología, de trauma, a niños y a pacientes de cáncer, algunos en fase terminal".