Un chico de 20 años le arranca el corazón a un travesti al considerarlo "un demonio"

Un joven de 20 años asesinó a un travesti con el que acababa de tener relaciones sexuales, le arrancó el corazón y cubrió la herida abierta en el pecho de la víctima con la imagen de un santo.

El crimen, que mezcla locura, salvajismo y fanatismo, ocurrió el lunes 21 de enero en la ciudad brasileña de Campinas, a 100 kilómetros de São Paulo, y el autor, Caio dos Santos Oliveira, ya está detenido.

En otro macabro detalle de este asesinato, Caio llevó el corazón del travestido a su propia casa. La policía encontró el corazón de la víctima envuelto en un trozo de tela escondido bajo el armario del dormitorio de Gaius.

La víctima, identificado como Genilson José da Silva, de 35 años, que puede haber sido asesinada con un cuchillo, debe haber luchado mucho por la vida, porque cuando Caio fue arrestado tenía moretones y arañazos por todo el cuerpo.

Fue arrestado por casualidad por agentes del Batallón Especial de Acción Policial, BAEP, de Campinas, quienes pasaron por él en patrullajes de rutina cuando aún no se conocía el crimen y decidieron acercarse a él. Fue cuando se dieron cuenta de que el joven se había puesto muy nervioso cuando vio a la policía.

En la comisaría, Caio, sin arrepentirse, confesó el crimen pero se negó a dar detalles, sólo confirmando que había conocido a la víctima unas horas antes, que habían tenido relaciones sexuales y que después de "descubrir" que la víctima "era un demonio", lo asesinó, le abrió el pecho y le sacó el corazón.

Al ser presentado a la prensa, el asesino confeso repitió la misma historia y sorprendió a todos sonriendo con frecuencia, como si no fuese consciente de la gravedad del crimen que había cometido. 

"Era un demonio y le arranqué el corazón. Eso es todo. No lo conocía, lo había conocido a medianoche", repitió simplemente a los periodistas.

El cuerpo de Genilson se encontraba en la pequeña habitación que utilizaba, a un lado de la carretera, con el pecho abierto y cubierto con una imagen religiosa, dejada por el asesino.

Después, según publica la prensa local, los agentes encontraron en la casa del asesino diversas pertenencias de la víctima, así como su corazón.