VIDEO| Activistas o vándalos: el debate se reabre tras el ataque a la Sagrada Familia

Activistas del grupo Futuro Vegetal rociaron con pintura roja y negra la Basílica de la Sagrada Familia de Barcelona. El objetivo de la protesta, llevada a cabo este  domingo, era denunciar la "complicidad" del gobierno español frente a los graves incendios forestales que han arrasado el país. 

Docenas de protestas

Futuro Vegetal argumenta que el gobierno ha tomado medidas insuficientes contra el cambio climático, a pesar de que los incendios han causado daños extensos y la pérdida de cuatro vidas, además de arrasar unas 870.000 acres de tierra solo en las últimas dos semanas. El grupo, que atribuye el 70% de los incendios a la ganadería (según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación), ha realizado docenas de protestas similares, incluyendo la que hicieron en 2022 en el Museo del Prado, donde se pegaron a los marcos de pinturas de Goya.

En el punto de mira de la Fiscalía

La Fiscalía General del Estado ha puesto el foco en las acciones de "ecologismo radical", que han visto un notable incremento .  En su informe anual en 2022, el Ministerio Fiscal recoge 31 detenciones relacionadas con este tipo de activismo, incluyendo a los cinco científicos arrestados en Múnich por una protesta en la sede de BMW y los 14 detenidos por teñir de rojo las escalinatas del Congreso en Madrid.

El informe de la Fiscalía clasifica estas acciones dentro del capítulo de "terrorismo", un lugar que comparte con la "izquierda radical" y el "anarquismo insurreccionalista", a pesar de que las infracciones señaladas se limitan a concentraciones no comunicadas y daños materiales. El "ecologismo radical" ha incrementado su actividad tanto en cantidad como en calidad, y se prevé que las acciones continúen, ya que cada vez más jóvenes se unen a estos grupos.

Contexto global y consecuencias legales

El enfoque de las autoridades españolas hacia el "ecologismo radical" se compara con la de otros países europeos, como Reino Unido, donde activistas han sido encarcelados por protestas similares, como lanzar sopa a una pintura de Van Gogh. La Fiscalía también señala que, a pesar de que otros grupos, como los anarquistas o la extrema derecha, cometen delitos más graves como la incautación de armas o la incitación al odio, son los ecologistas quienes están bajo una vigilancia y seguimiento "exhaustivo". El grupo Futuro Vegetal ha sido especialmente activo en su campaña contra el sector cárnico, y sus protestas han incluido el lanzamiento de pintura en lugares como el Museo del Prado y un yate de lujo en Ibiza. La Fiscalía anticipa que estas acciones seguirán en aumento, a medida que más jóvenes se sumen a la lucha por modelos de sociedad sostenibles.