Eugenia Osborne, sin piedad contra la ex de su padre, Gabriela Guillén

Aunque Eugenia Osborne siempre ha intentado mantenerse al margen de todo lo relacionado con el hijo que su padre, Bertín, tuvo con Gabriela Guillén, y suele responder con cortesía o evasivas cuando se le pregunta por las declaraciones de la paraguaya (quien ha denunciado públicamente que el presentador solo ha visto al niño una vez en 17 meses y no le pasa manutención), esta vez ha decidido no quedarse callada.

Al enterarse de que Gabriela está escribiendo su autobiografía (en la que, previsiblemente, hablará de su relación con Bertín y de cómo vivió su ausencia durante el embarazo), Eugenia ha respondido con ironía:
"¿Sus memorias? ¿Eso no se suele hacer cuando ya eres una persona mayor?", ha soltado con sorna. Además, ha asegurado que no cree que su padre publique nunca un libro sobre su vida, ya que "él es discreto", dejando entrever que no opina lo mismo de Gabriela.

Después de que la modelo calificara a Bertín como "un cero" como padre de su hijo en común, Eugenia ha salido en su defensa."Yo, como abuelo, le doy un 10 porque lo hace fenomenal: juega con ellos, los tira a la piscina, les organiza planes divertidos, habla con ellos... Y como padre, pues le vamos a dar un notable, un 7,5", ha valorado.

En cuanto a los rumores sobre un supuesto encuentro entre ella y Gabriela en El Retiro, en el que supuestamente evitó saludarla, Eugenia ha sido tajante. "La verdad es que me parece como de patio de recreo. De 'ha hecho esto', 'ha hecho lo otro'... Me parece algo de adolescentes y no voy a entrar en ello", ha dicho con contundencia. Y ha añadido que"yo no soy una maleducada, pero bueno, que cada uno piense lo que quiera", dando por zanjado el tema.

Por último, Eugenia ha opinado sobre el encontronazo que su padre tuvo hace unos días con un reportero de Europa Press, con el que se mostró un tanto altivo y desagradable: "Lo debió de coger en un momento malo. Todos tenemos días malos, incluso en casa, en el trabajo, a veces reaccionamos contra alguien que no se lo merece, y pues lo cogió en un momento malo" ha justificado, reconociendo que "entiendo la fustración de mi padre porque es su vida privada y es algo de lo que no tiene por qué hablar".