Lamine Yamal compra la mansión de Shakira y Piqué en Esplugues

La mansión que fue escenario de la vida familiar de Shakira y Gerard Piqué vuelve a cobrar relevancia mediática, esta vez por la adquisición de Lamine Yamal, estrella emergente del FC Barcelona. La operación marca un punto de inflexión en la vida personal del joven futbolista y subraya el interés continuo de figuras destacadas en propiedades de alto perfil en Catalunya.

Una compra que simboliza madurez y estabilidad

A sus 18 años, Lamine Yamal da un paso significativo en su desarrollo personal al adquirir la vivienda ubicada en la urbanización Ciutat Diagonal de Esplugues de Llobregat, conocida por ser un enclave tranquilo y seguro de la ciudad. Según fuentes de El País, la operación, valorada en aproximadamente 14 millones de euros, representa no solo un aumento de patrimonio sino también la creación de un entorno que favorezca la vida privada y profesional del futbolista.

“Es un hogar que permitirá compaginar mi carrera deportiva con un espacio seguro y cómodo”, señalaron allegados del jugador. La residencia, famosa por su diseño contemporáneo, amplios espacios y jardines privados, será transformada para adaptarse a las exigencias de un deportista de élite: gimnasio personal, área de fisioterapia, sistemas de seguridad avanzados y zonas de ocio.

Historia y legado de la propiedad

La mansión adquirida por Yamal fue hogar de Shakira y Piqué durante años, convirtiéndose en un icono mediático y social en Barcelona. La propiedad, construida en 2012 y diseñada por la arquitecta Mireia Admetller, forma parte de un complejo residencial de casi 4.000 metros cuadrados con tres viviendas interconectadas. La residencia incluye seis dormitorios, cinco baños, varias terrazas, salones amplios, cocina con isla central, piscina interior y exterior, gimnasio, biblioteca, sala de cine y estudio de grabación utilizado por Shakira. Los exteriores cuentan con campo de fútbol y pista de pádel, reflejando la pasión deportiva de Piqué.

Tras la separación de la pareja en 2022, la vivienda permaneció sin ocupantes y con dificultades para venderse. Finalmente, una de las tres casas del complejo se vendió en 2025, abriendo la posibilidad de que Yamal consolidara su compra. Según información publicada, el delantero planea adaptar la propiedad a su estilo de vida y al de su pareja, la cantante argentina Nicki Nicole.

El valor simbólico de la residencia

Más allá de la inversión económica, la adquisición tiene un fuerte componente simbólico. La mansión representa la historia de dos de las figuras más influyentes vinculadas al Barça y ahora pasa a manos de otra joven estrella catalana. “Esta compra permite a Lamine ocupar un espacio que combina historia, privacidad y modernidad, ofreciendo un hogar estable para su crecimiento personal y profesional”, comentan fuentes cercanas al jugador.

La operación refleja también la capacidad financiera del futbolista, cuyo salario anual en el FC Barcelona se estima en 17 millones de dólares, lo que le permite afrontar una inversión de este nivel sin comprometer su estabilidad económica.

Transformación y modernización

Lamine Yamal no solo se muda a una residencia icónica, sino que también proyecta transformarla para adaptarla a su rutina profesional. La casa incorporará nuevas medidas de seguridad, espacios para entrenamiento físico, áreas de descanso y convivencia para familiares y amigos. De esta manera, el inmueble pasará de ser un símbolo del pasado mediático a convertirse en un hogar funcional para un deportista en pleno auge.

La compra consolida a Yamal como una de las figuras emergentes más relevantes en el ámbito deportivo y social de Catalunya, continuando el legado de propiedades de alto perfil que trascienden la esfera privada para convertirse en referencias públicas, al igual que ocurrió con Shakira y Piqué durante años.