Jaume Roures mantiene su influencia en el FC Barcelona a pesar de su salida de Mediapro

Rumores de inversiones externas y la perspectiva de una Superliga europea añaden complejidad a la ecuación financiera del club, que aspira a mantenerse como un referente mundial en el ámbito deportivo.

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Rumores de inversiones externas y la perspectiva de una Superliga europea añaden complejidad a la ecuación financiera del club, que aspira a mantenerse como un referente mundial en el ámbito deportivo. EP

El empresario catalán Jaume Roures, a pesar de no estar vinculado a Mediapro en la actualidad, continúa desempeñando un papel influyente en el FC Barcelona. Su respaldo como avalista de la Junta actual de Joan Laporta y su participación en Barça Studios, la rama audiovisual del club que busca salir a Bolsa en Estados Unidos con una valoración de 1.000 millones de dólares, consolidan su conexión con la entidad.

 

La sugerencia de Roures de que la solución económica para el Barcelona podría ser la venta parcial del club, inspirándose en el modelo del Bayern de Múnich, plantea interrogantes sobre el futuro financiero del equipo. Estima que la venta del 25% del Barça podría superar los 1.150 millones de euros, lo que contribuiría a reducir la deuda y a equilibrar el déficit operativo, a pesar de la compleja coyuntura económica generada por la pandemia.

 

Kurt Badenhausen, responsable de valoraciones de Sportico, destaca que el valor del Barcelona no ha experimentado una disminución en el último año. La propuesta de venta parcial del club podría ser una estrategia para paliar las consecuencias financieras derivadas de la crisis sanitaria.

 

Aunque desde el FC Barcelona se descarta la posibilidad de cotizar en mercados y de perder el control por parte de los socios, se rumorea que existiría una predisposición interna hacia operaciones financieras, incluso con inversiones provenientes de Arabia Saudí, Qatar o Abu Dabi. La eventual creación de una Superliga europea, con un posible lanzamiento en el segundo semestre de 2025, también se presenta como un factor determinante para el futuro del club.

 

El sueño de Joan Laporta de tener el nuevo Camp Nou operativo en 2026 se proyecta como un impulso para la recuperación del FC Barcelona, que actualmente enfrenta desafíos en términos de ingresos por taquilla esta temporada y busca estrategias financieras para mantenerse como un referente mundial en el ámbito deportivo.

 

 

 

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