Mohamed VI: el estilo y las excentricidades del rey de Marruecos

Mohamed VI, el rey de Marruecos desde 1999, es conocido no solo por su papel político y económico en el país, sino también por su gusto refinado en la moda y un estilo de vida que refleja su posición como uno de los monarcas más ricos del mundo.

La última vez en que se le ha visto en público ha sido recientemente en París, acompañado por sus dos hijos... y vistiendo unos pantalones llamativos que cuestan 1.050 euros en la tienda original.

El estilo del rey: tradición y modernidad

Mohamed VI combina con elegancia la vestimenta tradicional marroquí con piezas de alta moda contemporánea. En ocasiones oficiales, es común verlo con la djellaba, una túnica tradicional, confeccionada con materiales de alta calidad y con detalles que denotan lujo. Sin embargo, fuera de estos eventos, su preferencia por marcas de renombre internacional como Dior, Gucci y Hermès demuestra su aprecio por la moda occidental.

Accesorios de lujo y colecciones exclusivas

El monarca también es un amante de los relojes exclusivos, siendo propietario de piezas de marcas como Patek Philippe y Rolex, algunas de las cuales están personalizadas. Su colección de relojes, valorada en varios millones de dólares, es una de las más completas y costosas entre los líderes mundiales.

Los accesorios como gafas de sol y zapatos personalizados también forman parte de su característico estilo, reflejando una atención al detalle que no pasa desapercibida.

Excentricidades que trascienden la moda

Además de su interés por la ropa y los accesorios, Mohamed VI ha sido reconocido por su amor por los autos de lujo. Se le atribuye una impresionante colección de vehículos que incluye modelos de Rolls-Royce, Bentley y Mercedes-Benz, muchos de ellos diseñados específicamente para él.

Asimismo, su gusto por el arte se manifiesta en la adquisición de obras de renombrados artistas contemporáneos y tradicionales. Los palacios del rey, repartidos por Marruecos y Europa, están decorados con piezas únicas que destacan por su valor histórico y estético.

El contraste con lo que ocurre en el país

El estilo de vida de Mohamed VI, sin embargo, ha sido motivo de críticas debido a las desigualdades sociales que persisten en Marruecos. Aunque el rey es admirado por muchos por su carisma y sofisticación, sectores críticos señalan que las excentricidades del monarca contrastan con la realidad de una parte significativa de la población que enfrenta retos económicos.

Un reflejo de poder y distinción

Mohamed VI utiliza su imagen y su gusto por el lujo no solo como una expresión personal, sino también como una herramienta de poder blando. En cada aparición pública, refuerza la percepción de Marruecos como un país que honra sus tradiciones mientras busca proyectar modernidad y exclusividad.