Explota el escándalo: nuevas acusaciones revelan la relación de Trump con Jeffrey Epstein
Supervivientes, documentos desclasificados y antiguos allegados apuntan a que el expresidente mantuvo una amistad mucho más estrecha con el magnate acusado de abuso sexual. People recuerda que Trump llegó a definir a Epstein como un “tipo estupendo” en 2002
La sombra de Jeffrey Epstein vuelve a acechar a Donald Trump. En una conferencia de prensa en el Capitolio, varias presuntas víctimas del multimillonario insistieron en que el expresidente mantuvo una relación más cercana con Epstein de lo que ha admitido públicamente. Entre ellas, la ex actriz Chauntae Davies declaró que Epstein presumía de su amistad con Trump y que incluso tenía una fotografía enmarcada de ambos en su escritorio.
Según recoge People, Trump llegó a calificar a Epstein de “tipo estupendo” en 2002 en una entrevista con la revista New York, afirmando: “Incluso se dice que le gustan las mujeres hermosas tanto como a mí, y muchas de ellas son más bien jóvenes”. Estas palabras vuelven a ser citadas mientras el Congreso exige transparencia total en los archivos sobre el caso Epstein.
El congresista Robert García denunció que, pese a la reciente publicación de 33.295 páginas de documentos, la administración Trump sigue ocultando archivos clave que podrían aclarar la magnitud de la relación entre el expresidente y el magnate caído en desgracia.
Por su parte, Jack O’Donnell, exejecutivo del Trump Plaza Hotel & Casino, aseguró en una entrevista con CNN que en los años 80 Epstein era “su mejor amigo” y que ambos visitaban con frecuencia el casino juntos. Incluso relató un episodio en el que Trump y Epstein habrían ingresado con tres mujeres menores de 21 años, algo ilegal en Nueva Jersey.
Mientras tanto, Trump sigue restando importancia al escándalo. En declaraciones recientes desde la Casa Blanca, tachó las acusaciones de “engaño demócrata sin fin” y evitó responder si está protegiendo a viejos “amigos” o donantes al no publicar todos los archivos.
El asunto Epstein, que también ha salpicado a Bill Clinton, vuelve a poner bajo el foco las amistades peligrosas del expresidente y amenaza con convertirse en un nuevo frente político y judicial.
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