"Reprogramar" el Govern para una nueva realidad: el objetivo de Illa en Núria este fin de semana

En pleno auge de la tensión global por la nueva oleada de aranceles decretada por el presidente estadounidense Donald Trump, el president de la Generalitat, Salvador Illa, ha lanzado un mensaje contundente desde el corazón del Pirineo catalán: “La situación es compleja y el impacto no será bueno para nadie”.

Durante un encuentro de dos días del Govern en el Valle de Núria —convocado para hacer balance de los primeros ocho meses de legislatura y definir los próximos pasos—, Illa ha reconocido que los efectos de esta nueva guerra comercial ya se sienten en la economía catalana, especialmente en las exportaciones, y ha advertido que el contexto actual obligará a “reprogramar” las prioridades del ejecutivo.

“Los aranceles significan división, poner fronteras, retroceso económico y social”, ha afirmado el president en declaraciones a los medios antes de iniciar la cumbre con su equipo.

Illa ha subrayado que el impacto directo se verá en las exportaciones, pero también habrá un efecto indirecto difícil de calcular en una economía interconectada como la catalana. En este sentido, ha instado a los ciudadanos a actuar con “serenidad, confianza y determinación” y ha reiterado que la respuesta de Catalunya estará alineada con Europa y España.

Pedro Sánchez ya anunció un plan de choque de 14.000 millones de euros para mitigar los daños. Illa, por su parte, ha confirmado que el Govern ya está elaborando su propio plan complementario, con cuatro conselleries trabajando en paralelo, y que se coordinará con los sectores más afectados, empresas, la Mesa de Diálogo Social y los grupos parlamentarios.

¿Qué medidas prepara el Govern?

Aunque todavía no se han detallado todas las acciones, Illa ha asegurado que “no se descarta ningún tipo de medida”. El ejecutivo catalán revisará recursos presupuestarios y prioridades para reforzar los sectores productivos más golpeados por los nuevos aranceles.

“Tendremos que adaptarnos. Habrá reprogramación de algunas medidas ya anunciadas y posiblemente uso de suplementos de crédito”, ha advertido el president, que también ha criticado duramente la postura del gobierno de EE.UU.: “Es una decisión injustificable desde cualquier punto de vista”.

Este encuentro en Núria es el segundo gran retiro estratégico del Govern en lo que va de legislatura —el primero tuvo lugar en Poblet— y simboliza, según fuentes de Presidencia, la necesidad de un liderazgo fuerte y sereno ante un nuevo ciclo económico global incierto.