Sirera alerta a Collboni: “Los chiringuitos son lugares seguros ante robos y agresiones”

El presidente del grupo municipal del Partido Popular, Daniel Sirera, ha lanzado una durísima crítica contra el alcalde Jaume Collboni, exigiendo el fin inmediato de las “restricciones injustificadas” a los chiringuitos de playa durante la noche más concurrida del verano.

Sirera ha cargado contra la continuidad de las limitaciones impuestas desde la pandemia, que obligan a cerrar los chiringuitos a las 3:30 de la madrugada, prohíben la instalación de barras adicionales y la contratación de DJ’s. “Si bien en el contexto de la pandemia tenía sentido, ahora no responde más que a otro castigo a la restauración de la ciudad”, ha sentenciado el líder popular, denunciando un trato que considera arbitrario e injusto.

El concejal ha advertido que mantener estas medidas “es un grave error que multiplica la venta ilegal de alcohol, los botellones y la delincuencia”. Asegura que restringir el funcionamiento de estos locales no solo perjudica al sector de la restauración, sino que además provoca un vacío de seguridad y control en un momento crítico: “Cada año unas 75.000 personas se reúnen en las playas. Sin oferta regulada, se da paso al descontrol”.

Sirera ha dirigido también sus críticas a la figura de la ‘alcaldesa de noche’, una figura impulsada por el consistorio para gestionar el ocio nocturno, a la que acusa de “inacción total”. “No se ha manifestado ni ha hecho ninguna propuesta para responder a la demanda de esa noche”, ha declarado con contundencia.

En uno de los puntos más sensibles de su intervención, el dirigente del PP ha subrayado que los chiringuitos no son solo lugares de ocio, sino “espacios regulados, fiables y seguros” ante posibles robos, agresiones sexuales o altercados violentos. Al eliminarlos o limitar su actividad, el Ayuntamiento, según Sirera, renuncia a un recurso esencial para garantizar la seguridad ciudadana durante una de las noches más conflictivas del año.

Con este ataque directo a la gestión del alcalde Collboni, Daniel Sirera sitúa la seguridad pública y la gestión del ocio nocturno en el centro del debate político barcelonés, y anticipa una verbena de Sant Joan marcada por la tensión institucional, la preocupación vecinal y la presión creciente sobre el Govern municipal.