¿Hacia dónde va Illa? El president marca territorio desde China con tres mensajes clave para Catalunya
En solo unas horas, Illa defiende la aplicación íntegra de la amnistía, exige reconocimiento por preservar el patrimonio de Sijena y planta cara a las críticas sobre el calendario tributario. Su gira asiática se convierte en un escenario de alto voltaje político.
El primer viaje oficial de Salvador Illa como president de la Generalitat ha servido mucho más que para abrir relaciones económicas con China. En solo tres comparecencias desde el país asiático, el líder del Ejecutivo catalán ha lanzado tres mensajes de calado que definen su hoja de ruta para los próximos meses: justicia, reconocimiento institucional y reforma fiscal estructural.
Illa ha convertido este viaje en una plataforma para marcar perfil político, exhibir liderazgo y responder tanto a sus adversarios como a quienes, dentro y fuera de Catalunya, cuestionan la capacidad de su Govern para transformar a fondo el modelo de país.
Amnistía sin excepciones: “La última palabra la tienen los ciudadanos, no los jueces”
Desde Shanghai, Illa reclama que la Ley de Amnistía se aplique en su integridad y sin dilaciones a todos los afectados, dejando claro que considera superado cualquier debate legal o técnico:
“Espero que en el próximo curso político, que empezará en septiembre, todo el mundo pueda ejercer su actividad política y que, en consecuencia, la amnistía sea efectiva. Me gustaría que esto ya hubiera pasado”.
Y va más allá al remarcar que en democracia la voluntad popular está por encima de cualquier otro poder:
“La última palabra la tienen siempre los ciudadanos, no los jueces. Por intermediación de sus representantes deciden las leyes que deben salir adelante”.
El president subraya que el Congreso ha aprobado la norma por el cauce reglamentario y que ha sido validada constitucionalmente. En su opinión, no hay espacio ya para la resistencia a su cumplimiento:
“Hoy no lo entiendo”.
Pinturas de Sijena: “Sin Catalunya, hoy no existirían”
En una segunda comparecencia, Illa responde con firmeza a las críticas del Gobierno de Aragón al MNAC por no facilitar documentación sobre las pinturas murales de Sijena. Lo ha hecho no desde el victimismo, sino desde la reivindicación de una responsabilidad cumplida:
“Respeto todas sus posiciones, y que reclamen lo que tengan que reclamar. Es de buena educación, primero, agradecer y reconocer que si no hubiera sido por autoridades y gente de Catalunya, estas pinturas hoy, lamentablemente, ya no estarían”.
La Generalitat ha mantenido durante décadas estas obras bajo custodia técnica y conservación especializada. Illa exige que se reconozca públicamente ese esfuerzo institucional antes de continuar con cualquier negociación o requerimiento.
Fiscalidad sin humo: “Por primera vez, hay un plan concreto”
La tercera intervención se ha centrado en la fiscalidad. Illa responde a ERC y Junts, que han criticado el aplazamiento hasta 2028 del inicio de la recaudación del IRPF por parte de la Agència Tributària de Catalunya (ATC). Su respuesta fue tajante:
“El Govern no vende humo”.
El líder del PSC defiende que el acuerdo alcanzado con el Gobierno central en la comisión bilateral marca un camino realista hacia la gestión íntegra de los tributos en Catalunya:
“Esto requiere un fortalecimiento, una mejora de los recursos y las capacidades de la ATC. Esto no se hace en un mes ni en un día, pero por primera vez hay un plan previsto de cómo hacerlo”.
Advierte que ese compromiso exige cambios legislativos, etapas sucesivas y voluntad política sostenida. Y expresa su reconocimiento al Gobierno de España, en especial a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, por su papel en este proceso.
Presupuestos, catalán, Gaza: el mapa de prioridades del Govern
Más allá de los tres ejes principales, Illa ha aprovechado el balance de su primer año de mandato para remarcar su intención de agotar la legislatura, seguir ejecutando los presupuestos vigentes y arrancar ya los trabajos para los de 2026. En este sentido, pide altura de miras a los grupos del Parlament:
“Espero que el resto de fuerzas antepongan los intereses de Catalunya a los propios, como hizo el PSC cuando estaba en la oposición”.
También ha lamentado la falta de avances en el pacto por el catalán e instó directamente al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, a dejar de entorpecer la oficialidad del idioma en Europa:
“Menos hablar y más hacer. Aún más fácil: más dejar hacer. No se ponga por el medio. Es el mejor servicio que puede hacer a Catalunya i a Espanya”.
Y ha cerrado con un mensaje de dimensión internacional al denunciar la situación en Gaza:
“Lo que está sucediendo es un genocidio inaceptable”.
Un president que consolida liderazgo desde el exterior
La gira china de Salvador Illa no se ha limitado al terreno económico. Ha sido una oportunidad aprovechada para consolidar un liderazgo político en clave de estabilidad, pragmatismo y ambición institucional. En un contexto nacional marcado por la tensión judicial, las reclamaciones territoriales y el debate sobre el modelo fiscal, el president ha querido dejar claro que su Govern avanza con paso firme y sin miedo al desgaste político. Porque, como dijo al inicio de su mandato: “Catalunya no puede permitirse perder más tiempo”.
Escribe tu comentario