La Generalitat pierde a su hombre fuerte en financiación singular: dimite Josep Manel Rosón
El secretario de Hacienda ha dejado su cargo en medio de un crecimiento de la tensión por la finaciación singular de Catalunya
La Generalitat de Catalunya ha perdido a una de sus piezas clave en el despliegue de la financiación singular. Josep Manel Rosón Santín, secretario de Hacienda desde septiembre de 2024, ha presentado su dimisión, según recoge el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC). Su salida se produce en plena fase técnica del modelo fiscal pactado entre PSC y ERC, inspirado en el régimen foral, y que busca que Cataluña recaude el 100 % de sus impuestos.
Rosón era considerado el hombre fuerte del Govern en esta materia. Bajo su mando estaba la Agencia Tributaria de Catalunya (ATC), encargada de liderar la transición hacia una hacienda propia. Su renuncia, calificada oficialmente como “cese”, se atribuye a una decisión voluntaria, aunque no se han hecho públicas las razones.
La dimisión llega en un momento de tensión política. El último plan director de la ATC, presentado en julio, aplaza la recaudación íntegra del IRPF más allá de 2028, contradiciendo el calendario previsto en el pacto de investidura. ERC ha elevado el tono y exige al president Salvador Illa avances concretos si quiere negociar los presupuestos de 2026. La formación republicana presentará el lunes una proposición de ley en el Congreso para transferir las competencias del IRPF a la Generalitat.
Rosón compartía desde hace semanas responsabilidades con Santiago Ramón, comisionado para el despliegue de la hacienda catalana, y con Andreu Navas, director de la ATC. Su salida deja al Govern sin el perfil técnico que había pilotado el diseño del modelo fiscal desde dentro, y abre interrogantes sobre la viabilidad del calendario pactado.
Antes de asumir el cargo, Rosón fue gerente de XALOC, el ente de la Diputació de Girona especializado en recaudación municipal, y ocupó cargos en el Ayuntamiento de Sant Boi de Llobregat. Su trayectoria lo convertía en una figura con experiencia directa en gestión tributaria, algo que ahora el Govern deberá suplir en un momento especialmente sensible.
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