Reforma de la ley de suelo: el plan de Sánchez para acelerar la construcción de viviendas asequibles

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha propuesto a las comunidades autónomas blindar la protección de las viviendas financiadas con recursos públicos y reformar la ley de suelo para frenar la subida de los alquileres en las zonas de mercado tensionado. Esta iniciativa, anunciada durante la XXVII Conferencia de Presidentes celebrada en Santander, busca garantizar la estabilidad y la accesibilidad de la vivienda pública a largo plazo.

Sánchez destacó la importancia de crear un parque público de viviendas asequibles que represente al menos el 20% del total del mercado. Para lograrlo, propuso que la protección de los inmuebles financiados con fondos públicos sea "permanente e irreversible", un giro respecto al modelo de vivienda protegida de los años 90, cuando la protección caducaba después de un tiempo y pasaba a formar parte del mercado libre.

En cuanto a la reforma de la ley de suelo, el Ejecutivo busca ofrecer mayor seguridad jurídica a los ayuntamientos para modificar sus planes urbanísticos y acelerar la construcción de viviendas asequibles. Además, la normativa se adaptaría al cambio climático, un aspecto clave en la planificación urbana contemporánea.

Sánchez subrayó que la cuestión de la vivienda es un tema prioritario para el Gobierno, especialmente para la población joven, que enfrenta grandes dificultades para acceder a la vivienda en propiedad o en alquiler. En su discurso, también mencionó otros temas clave como la financiación, la sanidad y la inmigración, pero destacó que el acceso a la vivienda será tratado con un enfoque colaborativo y constructivo entre las administraciones.

Este enfoque, que sigue la línea defendida por la ministra Isabel Rodríguez en el Congreso de los Diputados en octubre, marca un paso importante en la política habitacional del Gobierno, con el objetivo de asegurar el acceso a la vivienda como un derecho fundamental para todos los ciudadanos.