Sánchez, acorralado en el Congreso: Junts se alinea con el PP para forzar su comparecencia por el caso Leire

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se enfrenta a un creciente aislamiento parlamentario a raíz del caso Leire Díez. Lo que comenzó como una ofensiva del Partido Popular para forzar su comparecencia en el Congreso ha terminado sumando apoyos entre los socios habituales del Ejecutivo. Junts per Catalunya ha confirmado que respaldará la solicitud registrada por el PP, mientras que Esquerra Republicana (ERC) también reclama explicaciones por parte del jefe del Ejecutivo, aunque sin aclarar aún si votará a favor de la iniciativa. Podemos, por su parte, sigue valorando sumarse.

La situación se produce tras la publicación de varios audios en los que Leire Díez, excargo del PSOE, habría ofrecido pactos judiciales a empresarios investigados a cambio de información comprometedora contra agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Desde entonces, Sánchez ha evitado pronunciarse públicamente sobre el asunto, incluso en actos oficiales donde no ha admitido preguntas de los medios.

Sánchez guarda silencio

La presión sobre el presidente aumenta tras una semana de silencio institucional. Ni en sus intervenciones públicas ni en sus reuniones internacionales —como la mantenida con Ursula von der Leyen en Bruselas— ha hecho mención al caso. Mientras tanto, el Congreso espera la celebración de la próxima Junta de Portavoces, prevista para dentro de dos semanas, en la que se podría votar la solicitud de comparecencia.

El PP ha criticado la gestión de la Mesa del Congreso, presidida por Francina Armengol, al considerar que se han dado pasos para dilatar el proceso. Si la comparecencia no se aprueba en junio, y dado que julio y agosto son meses inhábiles en la Cámara, podría aplazarse hasta septiembre, salvo que se convoque un pleno extraordinario.

Además de la petición para que Sánchez comparezca, el Partido Popular ha registrado otras solicitudes para que lo hagan el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, y la directora general de la Guardia Civil, Mercedes González. Los populares piden explicaciones por las supuestas maniobras de Leire Díez, que implicarían un uso partidista de instituciones del Estado.

Podemos también ha elevado el tono. Su secretaria general, Ione Belarra, ha insistido en que “cada día de silencio” del presidente es “un día perdido para la democracia”. La formación morada no descarta apoyar la iniciativa del PP si eso permite exigir responsabilidades, aunque plantea la posibilidad de una solicitud propia si logra respaldo suficiente.

Con el apoyo de Junts y ERC, junto a los votos de PP y Vox, la comparecencia de Sánchez podría salir adelante, incluso sin la participación de Podemos. La ruptura del bloque de investidura es cada vez más evidente, en un contexto en el que el presidente del Gobierno se ve obligado a reaccionar, si no por voluntad propia, por la presión de sus antiguos aliados.