La Chunta cuestiona su apoyo al Gobierno tras el caso Cerdán y exige compromisos con Aragón

El escándalo que rodea al exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, por su presunta implicación en la trama de corrupción conocida como el caso Koldo, ha generado una seria crisis de confianza entre el Gobierno y algunos de sus aliados parlamentarios. Entre ellos, la Chunta Aragonesista (CHA) ha alzado la voz con fuerza, advirtiendo que se replanteará si merece la pena seguir sosteniendo al Ejecutivo.

Así lo ha expresado el diputado de CHA y portavoz adjunto del grupo Sumar en el Congreso, Jorge Pueyo, quien ha dejado claro que “todo está abierto”, incluidas posibles consecuencias como la retirada del apoyo parlamentario al presidente Pedro Sánchez. Aunque la intención no es provocar la caída del Gobierno, sí existe una creciente incomodidad dentro de la formación aragonesista, que considera que el PSOE está fallando tanto en el plano ético como en el político.

"La confianza está rota": Aragón exige respeto y regeneración democrática

Durante una comparecencia en el Congreso, Pueyo no ocultó su malestar con el rumbo del Gobierno. Denunció que el PSOE lleva tiempo “ninguneando” a sus socios y, en especial, a los territorios que representan, como Aragón. A su juicio, el trato hacia esta comunidad ha sido el de un “territorio de sacrificio”, sin el respeto ni los compromisos que merecen los acuerdos de investidura.

"La confianza se ha roto", sentenció el parlamentario, que exigió dos condiciones fundamentales para que pueda restaurarse: el cumplimiento de los compromisos con Aragón y una clara apuesta por la regeneración democrática. Solo entonces, explicó, se podrá plantear la continuidad de la relación con el PSOE.

El caso Cerdán, un punto de inflexión

La tensión se ha intensificado tras los últimos acontecimientos relacionados con el caso Cerdán, dentro del cual se investiga el presunto cobro de comisiones ilegales por contratos públicos en plena pandemia. Para la Chunta, la implicación de altos cargos socialistas en esta trama es "preocupante y desalentadora", y plantea dudas sobre la integridad de todo el proyecto político.

Pueyo fue especialmente contundente al descartar que se trate de “manzanas podridas” o “lobos solitarios”, insinuando que la corrupción podría tener raíces más profundas. “Ojalá fuera algo puntual, pero la realidad nos obliga a no mirar hacia otro lado”, afirmó.

Un debate interno inminente: ¿seguir o romper?

El diputado dejó claro que su formación no forma parte del Gobierno, y que su respaldo ha sido estrictamente parlamentario. Por ello, subrayó que los órganos internos de Chunta debatirán en los próximos días si resulta sostenible seguir apoyando a Sánchez.

Aunque Pueyo reiteró que no desean provocar una caída del Gobierno ni poner en riesgo la mayoría progresista y plurinacional en el Congreso, también aseguró que la paciencia de su grupo se está agotando.

"No sabemos qué noticia nos espera mañana", dijo, en referencia a la incertidumbre sobre el alcance de la trama. Esta sensación de inestabilidad añade presión al Gobierno y al PSOE, a quienes los socios de investidura están reclamando transparencia, explicaciones y acción política real.

Participación en la comisión de seguimiento del pacto

Para intentar reconducir la situación, Pueyo anunció su intención de participar activamente en la comisión de seguimiento del pacto de coalición entre Sumar y el PSOE. Su objetivo es claro: trasladar al partido socialista los incumplimientos con la agenda aragonesista y las promesas de regeneración democrática.

Además, exigirá que se investiguen todas las posibles ramificaciones del caso Koldo, y que se garantice que este tipo de prácticas no se repiten dentro del Gobierno de coalición.