España refuerza su compromiso con la OTAN: 14.000 nuevos militares para 2035

España se ha comprometido con la OTAN a un significativo aumento en el número de sus efectivos militares, añadiendo 14.000 nuevos integrantes a sus Fuerzas Armadas para el año 2035. Este refuerzo, que representa un incremento del 11% sobre la plantilla actual, se implementará de forma gradual, con la mitad de los nuevos efectivos incorporándose antes de 2029.

Ratificación en la cumbre de la Haya

El acuerdo forma parte del Objetivo de Capacidades que la OTAN ha asignado a España para el periodo 2025-2035, y fue ratificado durante la reciente cumbre de la Alianza en La Haya. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, adelantó esta información durante una comparecencia en el Congreso, destacando el esfuerzo de España por reforzar sus Fuerzas Armadas y de Seguridad. Sánchez mencionó que este incremento se suma a la ampliación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y a la participación en misiones de paz, lo que convierte a España en uno de los cinco países de la OTAN con más efectivos desplegados en la frontera oriental de Europa.

Inversión y Plan de defensa

Los planes para aumentar el número de militares ya estaban contemplados en el plan de seguridad y Defensa presentado por Sánchez en abril. Dicho plan, que prevé una inversión total de 10.471 millones de euros, destina el 35% de este gasto, aproximadamente 3.600 millones de euros, al primero de sus cinco ejes. Este eje se enfoca en mejorar las condiciones laborales de la tropa y marinería, aumentar los efectivos de las Fuerzas Armadas, actualizar los equipamientos y optimizar los sistemas de formación militar.

Debate sobre el gasto en defensa

A pesar de este compromiso con el aumento de personal, el presidente Sánchez ha reiterado que España no incrementará su gasto en Defensa al 2,5% del PIB, un objetivo acordado por los aliados de la OTAN en la cumbre de La Haya. Sánchez ha argumentado que el 2,1% del Producto Interior Bruto es "suficiente" para España, una postura que le ha valido críticas por parte del Partido Popular, quienes le acusan de no ser un socio fiable para la alianza atlántica.