Feijóo se lava las manos con el ‘Me gusta la fruta’: ahora asegura que no lo ha usado por Ayuso

La polémica en torno al ya célebre “Me gusta la fruta” vuelve a sacudir al Partido Popular, esta vez con Alberto Núñez Feijóo en el centro del huracán. El propio líder del PP difundió este domingo un vídeo en Instagram cantando Mi limón, mi limonero, acompañado de esa frase que Isabel Díaz Ayuso ha convertido en su muletilla desde que la utilizara como cortina de humo para disfrazar un insulto al presidente Pedro Sánchez en el Congreso.

Pero, lejos de reconocer su evidente guiño a la presidenta madrileña, desde Génova se apresuran a asegurar que Feijóo “no tiene vocación de insultar a nadie” y a desvincularlo de Ayuso. Una pirueta política que no esconde el cinismo de un dirigente que, cuando le conviene, no duda en usar la provocación como arma, y que después pretende borrar las huellas de sus propias palabras.

La dirección nacional insiste en que todo se enmarca en una simple celebración, mientras Cuca Gamarra llega a caricaturizar la polémica preguntándose si en España ya no se puede ni cantar canciones con fruta en la letra. El discurso, que pretende suavizar el gesto, suena hueco: el propio Feijóo había prometido en su día que no venía a Madrid a insultar, pero hoy se escuda en la broma fácil y en el pretexto festivo para esquivar las críticas.

Mientras tanto, el PP madrileño celebra el gesto y lo reivindica como un “símbolo de Madrid”. Dos versiones contradictorias en un mismo partido: la exaltación y el disimulo. Una muestra más de cómo Feijóo, lejos de desmarcarse del estilo Ayuso, lo reproduce con descaro y, al mismo tiempo, finge que nunca lo hizo.