84.000 folios para demostrar su inocencia: así justifica Ábalos sus chats con Koldo García

El exministro de Transportes José Luis Ábalos ha presentado un certificado del Congreso que acredita que, desde su paso al Grupo Mixto en febrero de 2024, ha solicitado 168 paquetes de papel DIN A4. Si cada paquete contiene 500 hojas —como es habitual, aunque el documento no lo especifica—, eso suma un total de 84.000 folios en 21 meses.

Este dato no es menor: Ábalos lo exhibe como prueba de que cuando hablaba de “folios” en sus chats, lo hacía en sentido literal. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sostiene que ese término era una clave para referirse a dinero en efectivo, supuestamente entregado por su exasesor Koldo García en el marco de una trama de comisiones ilegales vinculadas a contratos públicos durante la pandemia.

“Cuando hablo de folios, es que son folios y no dinero ilícito, como me ha atribuido estrafalariamente la UCO”, ha escrito Ábalos en su cuenta de X. El exministro considera “muy lamentable” tener que recurrir a un certificado de material de oficina para defenderse de lo que califica como una “conjetura” policial.

Además, Ábalos solicitó al juez del Supremo, Leopoldo Puente, que pidiera al Ministerio de Transportes un informe sobre los folios que usó durante su etapa como ministro (2018–2021), para reforzar su tesis de que el término no tenía un significado en clave. Sin embargo, el Supremo rechazó esa diligencia por considerarla “inútil y perjudicial”.

El exministro denuncia que se ha invertido la presunción de inocencia y que se enfrenta a una “prueba diabólica”: demostrar que no usó un lenguaje cifrado para encubrir pagos ilícitos. “El rigor de un proceso se basa en el principio de contradicción”, ha dicho, criticando que se acepte “sin más” un informe policial “basado en elucubraciones y conjeturas”.

En paralelo, Ábalos ha retado a que se publiquen todos los gastos y pagos realizados a los miembros de la dirección del PSOE desde 2017 hasta 2025, así como los de sus antecesores en los últimos 20 años, para demostrar que nunca usó su cargo para “actuaciones ilícitas ni para blanquear dinero”.

¿84.000 folios en 21 meses? Son unos 133 folios al día. ¿Mucho, poco, o justo lo necesario para imprimir la defensa de un político en apuros?