Escándalo en Hungría: Catalunya planta cara a Orbán tras la prohibición del Orgullo LGTBI

Una representación plural del Parlament se ha desplazado a la capital húngara para respaldar la causa LGTBI ante el veto gubernamental. La acción denuncia la fragilidad de libertades que se creían garantizadas en Europa.

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Archivo - La vicepresidenta primera del Parlament, Raquel Sans
La vicepresidenta primera del Parlament, Raquel Sans -Eduardo Parra - Europa Press - Archivo

 

La vicepresidenta primera del Parlament de Catalunya, Raquel Sans, ha lanzado este sábado un contundente mensaje desde Budapest: “La indiferencia no vale” en contextos de represión. Sus declaraciones se producen en respuesta a la prohibición de la marcha del Orgullo LGTBI en la capital húngara, decretada por el presidente del país, Viktor Orbán.

Presencia institucional en defensa de los derechos LGTBI

Sans ha participado en la ciudad junto a una delegación oficial del Parlament de Catalunya, conformada por representantes del PSC, ERC, Junts y Comuns, en una muestra de unidad institucional sin precedentes ante un retroceso flagrante en los derechos civiles dentro de la Unión Europea.

La comitiva catalana se encontraba en Budapest con motivo de la manifestación por los derechos LGTBI, que fue vetada por las autoridades húngaras. La presencia de cargos electos de diferentes sensibilidades políticas refuerza el compromiso compartido del Parlament en defensa de los valores democráticos y la igualdad.

Una alerta contra la regresión de derechos

Hay derechos que pensábamos consolidados y se demuestra que no lo están”, advirtió Sans en su intervención ante los medios, subrayando que la defensa de las libertades no puede darse nunca por sentada. “Si no se defienden siempre, nos los pueden arrebatar”, insistió, señalando el riesgo real de retrocesos incluso en derechos que parecían firmemente establecidos.

Catalunya como altavoz internacional

Con esta visita, el Parlament no solo denuncia la censura impuesta por el Gobierno de Orbán, sino que se erige como altavoz europeo en defensa del colectivo LGTBI y de las libertades públicas amenazadas en algunos Estados miembro.

La acción del Parlament se suma a una creciente preocupación internacional por las políticas restrictivas del gobierno húngaro, que ha sido objeto de repetidas críticas por parte de organismos europeos y entidades de derechos humanos.

 

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