La ley de la eutanasia cumple cuatro años: balance de adelantos y desafíos en su aplicación

La LORE en cifras: el crecimiento imparable de un derecho consolidado

Los datos del Departamento de Salud de 2024 corroboran un crecimiento constante en la aplicación de la LORE. Se han recibido casi 360 solicitudes de ayuda para morir, lo cual supone un aumento notable de más del 60% respecto al año anterior. De estas, 189 fueron aprobadas y 142 prestaciones se hicieron efectivas, un incremento de más de la mitad en solo un año.Estas cifras, que representan una pequeña fracción del total de defunciones en Cataluña (alrededor del 0,2%), reafirman que la eutanasia se está consolidando como un derecho sanitario más. Sin embargo, el proceso de resolución todavía es largo, con una media de más de dos meses (63 días), hecho que subraya la necesidad de agilizar los trámites.

Experiencias y retos persistentes en la implementación

DMD-Cat ha identificado varios obstáculos que todavía dificultan la plena implementación de la ley. Una de las principales preocupaciones es la persistencia de casos no formalizados, aquellas solicitudes que llegan sin un registro adecuado a causa de barreras impuestas por profesionales o por las mismas instituciones.

En este sentido, testigos como el de Lukas Barrero ilustran la necesidad de una mayor sensibilidad y formación. Barrero, el hijo de una mujer a quien se aplicó la eutanasia el pasado 18 de febrero de 2025, relató como su madre, con un dolor fortísimo a causa de una dolencia incurable, se le llegó a ofrecer una residencia en lugar de la prestación de eutanasia, evidenciando una carencia de comprensión sobre su situación real y el sufrimiento que vivía.

Así mismo, la figura de los referentes PRAM (Programa de Atención Médica Avanzada) es, según la entidad, insuficientemente reconocida y valorada en muchos centros. Por eso, insisten en la importancia de profesionalizar y compensar esta tarea, asegurando su presencia constante y la formación continuada. Finalmente, se considera imprescindible que todos los centros sanitarios dispongan de protocolos LORE claros, homologados por el Departamento de Salud y conocidos por todo el personal. Estas dificultades se hacen patentes en testigos personales. 

Cristina Valles,residenta de DMD Cataluña, hizo hincapié en el aspecto socioeconómico, señalando que cuestiones como la soledad o las dificultades económicas no están contempladas en la información que se proporciona. Afirmó que las personas con un nivel socioeconómico más alto, más informadas por cuestiones culturales o medios de comunicación, son las que actualmente pueden ejercer más fácilmente su derecho en la muerte digna, sugiriendo una brecha preocupante en el acceso equitativo.

Propuestas de mejora: verso un despliegue óptimo

Para abordar estos retos y garantizar un despliegue óptimo de la LORE y del Documento de Voluntades Anticipadas (DVA), DMD-Cat propone una serie de medidas. Entre ellas, destacan una campaña de comunicación institucional dirigida a la ciudadanía, el refuerzo de la oficina PRAM con personal específico para desencallar casos, la implementación de un protocolo estandarizado y auditable en todos los centros, y la creación de un registro de objetores real y efectivo que permita una gestión ágil de las suplencias. También se plantea la necesidad de compensar horàriament los referentes PRAM y de ofrecer formación anual obligatoria sobre la LORE y el DVA.

Apoyo institucional y crítica a la judicialització

En el marco de este balance, DMD-Cat ha querido expresar su apoyo explícito a la Comisión de Garantía y Evaluación de Cataluña (CGAC), el organismo que, según la entidad, ha actuado con rigor y sensibilidad interpretativa para asegurar el respecto de los derechos individuales. En este sentido, critican la judicialització de algunos puntos de la ley que, lamentan, han impedido que personas con la LORE aprobada puedan ejercer su derecho a decidir después de largos y penosos procesos. La entidad denuncia que "la justicia se presta a la manipulación de grupos que pretenden imponer su ideología", haciendo referencia a casos concretos que han llegado a los tribunales, a pesar de que la gran mayoría de solicitudes se han aplicado sin problemas.

La dignidad del final de vida: un derecho innegociable

DMD-Cat reitera que la LORE no es solo un texto legal, sino una conquista de libertad, dignidad y justicia para aquellas personas que sufren de manera insoportable e irreversible. Entienden que es un "acto de amor y de respeto hacia las familias" que tienen que convivir con el dolor y la impotencia de no poder aliviar el sufrimiento de sus seres queridos. Por todo esto, la entidad se compromete a continuar defendiendo el derecho a morir dignamente ante cualquier intento de retroceso, asegurando que ninguna solicitud se pierda y que jefe persona quede desatendida por carencia de recursos o protocolos.