Terror en Barcelona: una familia denuncia que disparan a diario hacia su domicilio y han herido a un niño

Una familia del barrio de Horta, en Barcelona, denuncia que desde finales de mayo está siendo atacada casi a diario por una persona que les dispara con un arma de balines. Según ha avanzado Betevé y confirmado el programa Versió RAC1, los disparos van dirigidos hacia su domicilio, e incluso el hijo menor resultó herido en uno de los ataques.

“No tenemos claro si el objetivo somos nosotros, porque no somos los únicos vecinos afectados, pero sí que somos quienes hemos recibido más impactos”, explica Pilar Rigol, madre de la familia, en declaraciones a Toni Clapés en RAC1.

El calvario comenzó el 21 de mayo mientras Pilar cocinaba. “Escuché un ruido muy fuerte, como si fuera un golpe, y cuando fui al comedor vi que mi hijo tenía un agujero en el brazo y estaba llorando”, relata la mujer. El proyectil había entrado por la ventana.

Desde ese día, los ataques no han cesado. “Algún día hemos llegado a recibir hasta 15 o 16 impactos”, afirma Pilar. La familia ha tenido que reorganizar su vida dentro de casa para protegerse: “No podemos estar en el comedor porque es donde llegan los disparos. Cuando tendemos la ropa lo hacemos con gafas gruesas para protegernos. Pasamos mucho miedo: los ojos están protegidos, pero el resto del cuerpo no”.

Denuncias sin solución

A pesar de haber interpuesto múltiples denuncias a los Mossos d'Esquadra, la situación sigue sin resolverse. “He puesto ocho o nueve denuncias y he ido tres veces a comisaría, pero la policía no puede hacer nada”, lamenta la vecina de Horta.

Según explica, los Mossos acuden cada vez que se produce un disparo y también interviene la policía científica. “Tienen sospechas de quién puede ser, pero si no lo pillan in fraganti no tenemos opciones. Hace falta una orden judicial para entrar en cualquier casa”, añade.

La familia desconoce quién podría estar detrás de los ataques. “Hace 15 años que vivo en esta finca y nunca he tenido problemas con nadie. Si tuviera alguna intuición de quién puede ser, habría intentado hablar”, asegura Pilar Rigol.

Aunque llevan cuatro días sin recibir impactos, la incertidumbre sigue presente: “No sabemos si se lo ha pensado mejor o, por el contrario, está esperando el momento indicado para volver a atacar”.