Una explosión en Munyonyo deja dos muertos en plena celebración del Día de los Mártires en Uganda

La deflagración, ocurrida cerca del Santuario de los Mártires de Kampala, ha generado conmoción nacional en una de las jornadas religiosas más importantes del país

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Bombero listo para su mision
Conmoción en Uganda después de una explosión mortal. Foto: Freepik

 

Lo que debía ser una jornada de recogimiento y homenaje religioso se ha visto sacudida por la tragedia en Munyonyo, un suburbio de Kampala, la capital de Uganda. Una explosión registrada la mañana del martes ha dejado al menos dos personas fallecidas, según los primeros informes oficiales. El incidente ha coincidido con la conmemoración del Día de los Mártires de Uganda, una fecha sagrada para el país que cada año reúne a miles de fieles cristianos en peregrinación.

El estallido se produjo cerca del Santuario de los Mártires de Munyonyo, lugar emblemático para los devotos ugandeses. Testigos afirman que la explosión ocurrió en una zona donde se concentraban peregrinos, justo en el acceso al recinto religioso. La onda expansiva y el pánico posterior han generado una gran preocupación entre los asistentes y las autoridades.

 

Primeras hipótesis: posible atentado suicida

Según las autoridades locales, entre los restos encontrados en el lugar se hallaron los cuerpos sin vida de dos personas, junto a lo que quedaba de una motocicleta completamente destruida. Las evidencias apuntan a la posibilidad de que se tratara de un atentado suicida, aunque aún no se ha confirmado de forma oficial.

“Todo indica que uno de los fallecidos sería el presunto atacante y el otro, el conductor del vehículo”, han señalado fuentes policiales. Sin embargo, los investigadores no descartan que pueda tratarse de una detonación accidental, y continúan examinando la zona en busca de respuestas más precisas.

 

Intervención inmediata de las fuerzas de seguridad

A los pocos minutos de producirse la explosión, las fuerzas de seguridad ugandesas desplegaron un amplio dispositivo en la zona. Militares, agentes de la policía nacional y el escuadrón antibombas acordonaron el área mientras los equipos forenses comenzaban con las tareas de inspección y recolección de pruebas.

La rápida actuación de los cuerpos de emergencia permitió evitar una mayor tragedia, ya que en las inmediaciones del santuario se encontraban congregados miles de peregrinos llegados desde distintas regiones del país para participar en la celebración anual.

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