Controlan un flanco del incendio de Las Médulas, pero el viento amenaza a nuevas localidades
Más de 700 personas han sido evacuadas en la provincia de León y cuatro han resultado heridas. El consejero de Medio Ambiente habla de "terrorismo ambiental" por la posible intencionalidad de los fuegos
El operativo desplegado para controlar el incendio que afecta al paraje natural de Las Médulas ha logrado estabilizar el avance de las llamas en el flanco noreste mediante la técnica de fuego controlado, evitando que el fuego se dirigiera hacia localidades como Borrones y La Chana. Sin embargo, la evolución en la zona sureste genera preocupación por las rachas de viento de hasta 40 km/h previstas, que podrían poner en riesgo poblaciones como Pombriego y Voces.
Más de 700 personas han sido evacuadas de zonas amenazadas, aunque solo unas 20 permanecen alojadas en polideportivos. Cuatro personas han resultado heridas con quemaduras y afecciones leves por calor. Además, el incendio ha causado daños materiales en viviendas de Carucedo y el propio paraje de Las Médulas.
El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, presidió la reunión del Cecopi para analizar la situación de los incendios que desde el sábado azotan la provincia de León. Según Suárez-Quiñones, se han registrado un total de 13 incendios, principalmente en el oeste provincial, en zonas como Bierzo, Laciana y Cabrera. Mientras algunos tienen origen accidental, otros parecen intencionados y están siendo investigados.
De los incendios activos, los más preocupantes son los de Yeres, Llamas de Cabrera y Fasgar-Murias de Paredes, que amenazan núcleos urbanos y el patrimonio natural. En Yeres, el uso de fuego técnico ha sido clave para estabilizar el flanco noreste y evitar la propagación hacia poblaciones cercanas. Sin embargo, la situación meteorológica adversa y los vientos podrían complicar el control del incendio en las próximas horas.
En Llamas de Cabrera, la orografía complicada dificulta las labores de extinción, y existe riesgo para el casco urbano de esa localidad y Santalavilla. El operativo confía en una ventana meteorológica favorable para avanzar en la perimetración del fuego, tarea complicada por la vegetación y el terreno abrupto.
En Fasgar-Murias de Paredes, se ha asegurado la parte sur, aunque se trabaja para evitar que las llamas alcancen Palacios de Sil. Las condiciones meteorológicas y la acumulación de incendios dificultan el trabajo de los bomberos y brigadistas.
El dispositivo movilizado cuenta con unos 500 profesionales, 20 medios aéreos, 14 bulldózer y 23 autobombas de diferentes administraciones, trabajando coordinadamente para contener el fuego.
El consejero ha reiterado el compromiso de la Junta de Castilla y León para cubrir los daños materiales ocasionados y ha denunciado la posible intencionalidad de la mayoría de los incendios: "Estamos ante una acción coordinada de terrorismo ambiental, que no se puede tolerar". Por ello, ha solicitado la colaboración ciudadana para ayudar en la investigación y evitar conductas imprudentes que puedan agravar la situación.
Escribe tu comentario