Una madre lleva a su hija al hospital pensando que tiene una infección de oído y acaban pidiendo un trasplante de corazón
La niña de casi dos años necesita un nuevo corazón, pero tendrá una lista de espera de dos años
Una madre se llevó el susto de su vida cuando le comunicaron que su hija necesitaba un trasplante de corazón. La madre de 31 años pensaba que su hija, de casi dos años, tenía una infección de oído o bien le estaban saliendo los dientes. No obstante, el médico descubrió que su corazón latía entre 180 y 220 latidos por minuto, por lo que fue trasladada de inmediato al Hospital de Bath, y posteriormente al Hospital Infantil de Bristol, Reino Unido, en el mismo día.
Los médicos ya avisaron a los padres que tendrán que esperar durante un plazo de dos años para conseguir un trasplante de corazón.
"La llevé al médico en junio porque se estaba frotando la oreja, solo pensé que era una infección de oído o un problema de dentición, pero cuando el médico la revisó, dijeron que su corazón latía a 180 BPM. Fuimos al hospital más cercano en Bath, quien dijo que su frecuencia cardíaca era de 210, por lo que el hospital infantil de Bristol envió una ambulancia de inmediato", narraba el padre de la niña.
La pequeña esperó durante un mes en el hospital de Bristol, donde sufrió sepsis y neumonía, una infección intestinal y una reacción adversa a su vacuna contra la gripe. A principios de este mes, la trasladaron al hospital Great Ormond Street, donde esperará a su trasplante.
El problema es que no será un trasplante sencillo, ya que necesitan encontrar un corazón adecuado para su peso y tipo de sangre, algo complicado y que les obligará prácticamente a vivir en el hospital durante dos años. "Escuchar que podríamos perderla por segunda vez fue absolutamente desgarrador. Le quitaron todos los coágulos de sangre e infecciones, y estuvo mucho mejor durante dos semanas", dijo el padre.
Añadía también que "el martes le quitaron el tubo de respiración y el viernes tuvimos nuestros primeros abrazos en meses. Ella estaba sonriendo y tratando de reírse, pero por la noche volvió a empeorar y sufrió un paro cardíaco. Sentimos que comenzamos desde cero nuevamente, y estamos esperando. Amelia es la chica más descarada y sonriente que jamás hayas conocido, haría cualquier cosa para estar en su posición. No debería estar mi hija allí".
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