Una joven de 15 años da a luz sola y asesina a su bebé recién nacido mientras los padres estaban en casa
La joven asesinó al bebé porque no quería que nadie se enterara y lo tiró a la basura
Una madre adolescente fue acusada de agredir a su hijo recién nacido y de colocarle algodón en la garganta con la intención de matarlo. La acusada, Paris Mayo, que actualmente tiene 19 años pero tenía 15 en el momento de los hechos, está siendo juzgada en el Tribunal de la Corona de Worcester (Reino Unido) por el presunto asesinato de su hijo, Stanley Mayo, ocurrido hace cuatro años en la casa de sus padres.
La acusación fue presentada el año pasado después de una investigación llevada a cabo por la policía de West Mercia. Durante la apertura del caso ayer, el fiscal Jonas Hankin KC declaró: "Entre las 9:30 p.m. y las 10:30 p.m. del 23 de marzo de 2019, Paris Mayo, de 15 años en ese momento, dio a luz a un bebé".
El parto tuvo lugar en el comedor de la casa familiar ubicada en Springfield Avenue, Herefordshire, donde la acusada vivía con sus padres y su hermano George. La acusada se encontraba sola durante el parto y dio a luz al bebé sin recibir asistencia.
Hankin explicó que en ese momento, los padres de la acusada se encontraban arriba realizando la diálisis para el padre, quien no se encontraba bien. "Después del parto, la acusada cometió actos de violencia contra el bebé, fracturándole los lados superior izquierdo y superior derecho del cráneo y causándole una lesión cerebral grave", continuó.
Aproximadamente dos horas después, al darse cuenta de que el bebé aún estaba con vida, la acusada introdujo trozos de algodón en la boca, la garganta y el cuello. "La primera pieza fue empujada tan profundamente en el esófago, el conducto por el cual la comida llega a nuestro estómago, que solo se descubrió durante la autopsia al examinar el cuello", añadió. Esto bloqueó sus vías respiratorias y se asfixió.
El Sr. Hankin añadió: "De repente, se produjo un momento de histeria y se escuchó decir: 'Hay un bebé en la bolsa' y... 'París ha dado a luz'". La madre de Mayo llamó al número de emergencia 999, y en el fondo se le escuchaba decir a su hija: 'Me lo podrías haber dicho, cariño, me lo podrías haber dicho, pobre bebé', repitiendo: '¿Por qué no me lo dijiste?'
Los paramédicos llegaron al lugar y encontraron a la madre de Mayo sosteniendo al bebé "envuelto en una sábana... y sin signos vitales", con Mayo a su lado. Dijo que había puesto al bebé en la bolsa porque no sabía qué hacer.
La adolescente le dijo a otro paramédico que "no sabía que estaba embarazada" y que el bebé "no parecía estar bien". Hankin agregó: "La acusada le dijo al paramédico que esperaba que su madre pensara que la bolsa era basura y la tirara".
Después de llegar al hospital, se la escuchó decir: 'No es mi culpa que el bebé muriera, ¿verdad?". El Sr. Hankin añadió: "La acusación dice que la acusada mató al bebé para evitar que se descubriera su embarazo y su nacimiento. Ella no quería al bebé". El juicio durará unas seis semanas.
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