Tarragona limita el horario de las terrazas: cambios clave en la nueva normativa municipal
La nueva ordenanza de terrazas entra en vigor con un periodo informativo de dos meses sin sanciones, e introduce cambios clave
Tarragona estrena este viernes su nueva ordenanza sobre terrazas, un reglamento que busca armonizar los horarios, reducir molestias vecinales y ordenar el uso del espacio público. Aunque la normativa entra en vigor de inmediato, el Ayuntamiento ha optado por aplazar las sanciones durante dos meses, periodo en el que se desarrollará una campaña informativa personalizada para los 500 establecimientos afectados.
Horarios unificados: cierre a las 00:00 horas de domingo a jueves
Uno de los principales cambios de la ordenanza es que las terrazas deberán recogerse a medianoche de domingo a jueves, una medida que se aplicará durante todo el año, sin importar la estación. Además, los jueves pasan a considerarse día laborable, por lo que los horarios más laxos que antes se permitían ese día desaparecen.
Solo en fechas excepcionales, como Carnaval, Semana Santa o Navidad, se permitirá ampliar el horario hasta la una de la madrugada. Otra medida destacada es que no se permitirán estructuras fijas en aceras de menos de cuatro metros de ancho, lo que afectará especialmente a locales ubicados en calles más estrechas.
Una campaña informativa puerta a puerta
Durante los próximos dos meses, el Ayuntamiento desplegará un equipo de seis personas –cinco informadores y un coordinador– que recorrerán todos los barrios de la ciudad para visitar individualmente a los 250 bares y 250 comercios que cuentan con terraza.
Estos informadores, que recibirán formación específica, comenzarán su trabajo a partir del 15 de junio, acompañados de un díptico explicativo con las principales novedades de la ordenanza. El objetivo, según la concejala de Comerç, Montse Adan, es acompañar al sector en este proceso de adaptación y evitar que el desconocimiento genere conflictos.
“Queremos poner fin a la impunidad. Daremos un margen de adaptación, pero si hay infracciones graves o reincidentes, se sancionará”, ha afirmado Adan.
Además de informar, estos técnicos elaborarán un informe personalizado de cada local, lo que permitirá tener una radiografía actualizada del tejido comercial y de restauración de la ciudad.
Régimen sancionador: tolerancia cero con los reincidentes
Una vez finalizado el periodo informativo, será la Guàrdia Urbana, a través de su Unidad de Investigación Administrativa, la encargada de hacer cumplir la ordenanza. Ocho agentes se ocuparán de vigilar y sancionar las infracciones.
El régimen sancionador contempla medidas estrictas: tres sanciones leves se acumularán en una grave, y estas pueden conllevar incluso la retirada definitiva de la autorización de terraza para el establecimiento infractor.
Comisiones de seguimiento y códigos QR
Para hacer un seguimiento de la implementación de la nueva ordenanza, el consistorio activará en junio comisiones técnicas y políticas. Uno de los puntos más relevantes será decidir cómo deben configurarse las terrazas de la Plaça de la Font, un espacio central que concentra buena parte de la actividad restauradora del municipio.
En paralelo, a partir de otoño, se empezarán a colocar códigos QR en los accesos de los locales con terraza. Estos códigos contendrán información sobre las características específicas de cada terraza y permitirán a los agentes municipales realizar inspecciones más eficaces y rápidas.
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