El secreto medieval a solo 90 km de Barcelona que parece sacado de un cuento

A apenas una hora y media de Barcelona se esconde uno de los pueblos más impresionantes de Cataluña: Cardona, una joya medieval entre montañas que enamora por su historia, su naturaleza y sus paisajes de película. Perfecto para una escapada de fin de semana, este encantador municipio del Bages te hará viajar siglos atrás con solo poner un pie en sus empedradas calles.

Una fortaleza de leyenda

El gran protagonista de Cardona es su imponente castillo, una de las fortalezas medievales mejor conservadas de Europa. Situado en lo alto de una colina, el Castillo de Cardona ofrece unas vistas espectaculares del valle del Cardener y alberga la famosa Torre de la Minyona, símbolo del municipio y testigo de siglos de historia y leyendas. Recorrer sus murallas y galerías es una experiencia que te transporta directamente a la Edad Media.

La montaña de sal que brilla bajo tierra

Pero si hay algo que convierte a Cardona en un lugar único, es su Montaña de Sal. Este increíble fenómeno geológico esconde en su interior la antigua mina de sal potásica, hoy convertida en el Parc Cultural de la Muntanya de Sal. Allí, a 86 metros bajo tierra, podrás descubrir un mundo de cristales, galerías naturales y formaciones minerales que parecen sacadas de otro planeta. Una visita guiada imprescindible tanto para niños como adultos.

Callejuelas con alma y gastronomía con carácter

El casco antiguo de Cardona conserva todo el encanto de su pasado medieval: plazas tranquilas, iglesias románicas y casas de piedra que invitan a perderse sin prisa. Entre paseo y paseo, no puede faltar una parada para degustar la cocina local: embutidos, guisos tradicionales y platos con sal de Cardona como ingrediente estrella. Restaurantes como La Premsa o El Centru ofrecen una experiencia gastronómica que une tradición y producto de proximidad.

Naturaleza, rutas y experiencias

Cardona no solo es cultura e historia. Su entorno natural permite hacer rutas de senderismo, recorridos en bicicleta e incluso vuelos en globo para admirar la comarca desde el aire. Además, durante todo el año se celebran ferias, mercados medievales y actividades culturales que mantienen viva la esencia del pueblo.

Un destino con alma

Cardona es uno de esos lugares que sorprenden, inspiran y se quedan grabados en la memoria. A solo 90 kilómetros de Barcelona, es la escapada perfecta para desconectar del ruido, reconectar con la historia y vivir una experiencia auténtica. Si aún no lo conoces, este es el momento de dejarte conquistar por su magia.