El viaje por Catalunya que recomienda Vogue: playas, vinos y arte en el destino más exclusivo

Barcelona sigue siendo uno de los destinos más vibrantes de Europa, pero ahora la revista Vogue ha puesto el foco en una ruta alternativa por Catalunya que promete enamorar a los viajeros más exigentes. En un artículo reciente, la prestigiosa publicación internacional recomienda una escapada que combina historia, enoturismo, arte y relax por algunas de las joyas menos conocidas (pero igualmente deslumbrantes) de la región.

Más allá de los nuevos bares de vino como Tiberi y Masa Vins, las galerías emergentes como Fuga y Único, y los hoteles boutique en Barcelona como Casa Llimona, Vogue propone salir de la capital para explorar lugares con alma y autenticidad.

Uno de los primeros destinos sugeridos es Tarragona, accesible en un breve trayecto en tren. Allí se puede visitar uno de los anfiteatros romanos mejor conservados de Europa, además de un complejo de circo imperial que deja sin aliento. Un poco más cerca de Barcelona, Sitges destaca por su arquitectura costera, sus terrazas con encanto y su proximidad al Parque Natural del Garraf, ideal para hacer senderismo.

Los amantes del vino no pueden perderse una excursión al Penedès, a solo 50 kilómetros de la capital catalana. Esta zona es reconocida como el corazón de la producción de cava en España y ofrece catas, bodegas familiares y paisajes de viñedos espectaculares.

Y para quienes buscan desconexión total, Vogue recomienda el Empordà, en el interior de la Costa Brava. Esta región, que fue refugio de artistas como Salvador Dalí, Gabriel García Márquez y Elsa Peretti, es famosa por sus paisajes bucólicos, pueblos de piedra y un ambiente creativo único. Galerías como Studio Tramuntana y Secret Mill mantienen vivo ese espíritu artístico.

La recomendación de alojamiento no se queda atrás: Mas de Torrent, una masía del siglo XVIII convertida en hotel de lujo, se alza como el lugar perfecto para hospedarse. Con vistas al encantador pueblo de Pals, spa de varios niveles, piscina exterior, rutas en bicicleta y un restaurante con menú degustación, es uno de los rincones favoritos de la élite barcelonesa.

Un viaje que promete ser mucho más que turismo: una experiencia cultural, sensorial y sofisticada en el corazón de Catalunya.