La sociedad catalana se ha ganado el derecho de que sus representantes puedan mantener un diálogo con el Gobierno central "auténtico, con respeto y de una cierta coherencia entre lo que pase en las reuniones y lo que vaya pasando en otros ámbitos".
Ha afirmado que al PSOE "ningún otro partido le puede decir nada" ante la crisis de Catalunya, y ha apelado a que "frente a esta situación hagan el favor de arrimar el hombro, con cordura" pero también con "patriotismo".
"Tenemos toda la determinación, estamos dispuestos a todos los sacrificios", ha afirmado este sábado tras inaugurar el parque del 1 de octubre de Juneda, acompañado del delegado del Govern de la Generalitat en Lleida, Ramon Farré.
El primer secretario del PSC ha reclamado a los partidos independentistas que no supediten la política a decisiones judiciales, y ha dejado claro que "el poder judicial puede ser criticado" pero que sus resoluciones deben ser acatadas.
El exvicepresidente de la Generalitat ha pedido que se afronte la negociación sin ninguna premisa: "Ni siquiera nuestra liberación o el traslado a cárceles catalanas".