Finalmente, la inversión no se farà.Cal recordar que la polémica se empezó a gestar a principios de agosto, cuando a pesar de la oposición vecinal y de los ecologistas, la ministra de Transporte española, Raquel Sánchez, y el vicepresidente del Gobierno , Jordi Puigneró, anunciaban un pacto para incluir la inversión en el nuevo Dora.A principios de septiembre, el borrador de la ampliación propuesto por el ejecutivo estatal, que apuntaba a una afectación de la Ricarda, provocó discrepancias entre los dos equipos de gobierno y, también, dentro de los mismos gobiernos, hasta el punto que el Estado decidió dar marcha atrás y dejar en suspenso una ampliación que finalmente no se producirá, al menos dentro de los próximos cinco años.
El Ministerio ha negado que exista ninguna alteración del acuerdo alcanzado.
Según lo publicado la ampliación del aeropuerto de El Prat afectaría a la zona protegida de La Ricarda.