"No hacer nada es muy difícil", ha explicado a The Guardian Friedrich Von Borries, uno de los autores del estudio
China no es uno de los países más preocupados por los derechos humanos. Ahora se sabe que también ve a los animales desde una perspectiva peculiar. En lugar de maniquíes, los científicos usan cerdos en pruebas de choque.
Los pulpos son conocidos por ser animales solitarios, antisociales. Pero su carácter cambia cuando se les da droga.
Una terapia experimental con un nuevo fármaco consigue reducir una proteína vinculada a esta enfermedad y frenar el deterioro cognitivo.