Los tres han contribuido "de forma significativa" al desarrollo de la investigación en ciencia de la salud del ICS con una actividad que, según el instituto, ha sido de reconocido nivel científico.
Esta modalidad resulta idónea para cumplir con los requisitos de distancia e higiene que impone la situación actual derivada de la Covid-19.
El sindicato pide al CatSalut que asegure los ingresos en el centro hospitalario que tiene los quirófanos cerrados por la presencia de hongos.
Un total de 4.974 empleados públicos del Institut Català de la Salut (ICS) están de baja por el Covid-19, según ha recpnocido el conseller de Políticas Digitales y Administración Pública, Jordi Puigneró.
"El principal motivo de no firmar ha sido porque abre la puerta a una contratación totalmente arbitraria de profesionales sanitarios".
Fuentes del ICS hablan de un relevo debido a un nuevo enfoque en la organización del hospital, que "empieza un ciclo que requiere un nuevo liderazgo en uno de los hospitales más importantes del país".
Durante el año 2015, el Instituto Catalán de Salud troceó los contratos de algunos medicamentos y los ofreció en exclusividad a un conjunto selecto de farmacéuticas.
Al analizar una muestra de varios hospitales, la Sindicatura ha detectado "varias incidencias" en la fiscalización de las retribuciones del personal en las cuentas del ICS en 2015.
La convocatoria de paro se mantiene tras fracasar los intentos por acercar posturas entre el colectivo sanitario y el Institut Català de Salut.
Pasarían de 1.300 personas a 1.550 por cada facultativo, pero no habla de eliminar visitas diarias.
AIFiCC recuerda que en Cataluña hay una falta de 18.000 enfermeros, dato que no queda reflejada en el documento.
El sindicato ha anunciado la "situación alarmante" de la atención primaria y ha pedido medidas urgentes para poner fin a su precarización.
El Hospital Universitario Arnau de Vilanova (Lleida) no quiso practicarle a la mujer una cesárea de emergencia.
Un programa informático permite regular el uso de antibióticos de forma individualizada.
La indemnización se abona tras un acuerdo alcanzado en un acto de conciliación.
La paciente, de 64 años en el momento de los hechos, fue diagnosticada en el Hospital del Mar de Barcelona en 2011 de piedras en la vesícula.
En su primer año al frente, cobró un total de 142.240 euros del grupo Eresa. Prat siguió cobrando 7.080 mensuales durante cuatro meses por un cargo que ya no ejercía. El expresidente utilizó una empresa familiar para desviar el dinero.
La presión de los trabajadores y la aprobación de los presupuestos del Estado han provocado que el Instituto Catalán de la Salud se tire atrás.
Salud no ha sustituido a una quincena de médicos jubilados de Terrassa de siete ambulatorios y ha dejado a 10.000 personas sin su doctor de cabecera.