El club ya había pagado 3,5 millones por el 50% y ha pagado 3,5 más por lo restante, convirtiéndole en el fichaje más caro de la historia del club.
El delantero brasileño del Espanyol aún no tiene claro cuál será su futuro ya que no ha concretado ningún detalle de su contrato, pero hoy por hoy está centrado en el partido contra el Granada.