Uno de los agentes implicados es un inspector de la Policía Nacional y los otros dos, agentes de la Guardia Civil, uno el teniente jefe de Altea.
Los investigadores han acreditado que hacían uso de las "ingentes cantidades económicas" que introducían en nuestro país para corromper e infiltrarse en instituciones públicas
Asimismo, está practicando una veintena de registros en diversas localidades de la provincia de Tarragona.