El 6 septiembre de 2012 el gobernador del Banco Central Europeo (BCE) anunció un cambio histórico en la política monetaria europea al declarar solemnemente que el euro era un objetivo estratégico que debía ser preservado por encima de cualquier otra consideración.
El presidente del Banco Central Europeo deja atada la política monetaria para los próximos años, según el consenso de los analistas.
El presidente saliente de la Comisión Europea lamenta que "no se haya convertido en una tradición" el mecanismo para elegir al jefe del Ejecutivo comunitario entre los cabezas de lista a las europeas.
Sobre la mesa del presidente del Banco Central Europeo se encuentran dos medidas clave para estimular la zona euro: reactivar la compra de deuda y rebajar los tipos de interés.
También ha rechazado la posibilidad de una subida del precio del dinero al apuntar que los tipos de interés se mantendrán al nivel actual.
El presidente del BCE sostiene que la zona euro necesita dotarse de un instrumento que evite la sobrecarga de la política monetaria.
El presidente del BCE pide paciencia y persistencia respecto a la política monetaria y advierte de la volatilidad en el tipo de cambio.
El presidente del BCE ha reconocido la preocupación por la volatilidad del mercado de divisas en la política monetaria.
Fue el 6 septiembre de 2012 cuando el gobernador Draghi anunció un cambio histórico en la política monetaria europea al declarar solemnemente que el euro era un objetivo estratégico que debía ser preservado por encima de cualquier otra consideración.
Mario Draghi decide mantener los tipos de interés sin cambios en el 0%, así como su estrategia de compra de activos, que a partir de abril reducirá su alcance a 60.000 millones de euros al mes.
El BCE amplía hasta finales de 2017 la compra de deuda, pero reduce su cuantía en 20.000 millones. Mantiene los tipos de interés al 0%.