Conoce cuál es la nueva amenaza terrorista en Barcelona
El islamismo radical continúa actuando en Barcelona y los servicios de información de la Policía Nacional han seguido investigando, tras la desarticulación de la célula que provocó el ataque terrorista en la ciudad condal, y han identificado a una peligrosa secta wahabita que supone una nueva amenaza.
El islamismo radical continúa actuando en Barcelona y los servicios de información de la Policía Nacional han seguido investigando, tras la desarticulación de la célula que provocó el ataque terrorista en la ciudad condal, y han identificado a una peligrosa secta wahabita que supone una nueva amenaza.
Existe según fuentes políciales un elevado nivel de “radicalismo” en algunos grupos islamistas especialmente en Barcelona. Unas “sectas” cuyos integrantes han sido instruidos en el wahabismo y defienden la violencia para “defender la moral”.
El wahabismo es una corriente del islam, que tiene su origen en el siglo XVIII y es mayoritaria en Arabia Saudí. Los defensores de esta rama ven a la Yihad como una herramienta para lograr sus fines, “haciendo la guerra” a los “musulmanes desviados” que no aceptan volver al Islam verdadero así como a los infieles enemigos de esta religión.
Esta teoría, de hecho, es la que sirvió de inspiración a Osama Bin Laden, y la que institucionalizó en Al Qaeda antes de perpetrar los atentados terroristas del 11-S en Nueva York. Años más tarde, el Estado Islámico también se declaró wahabita, proclamando la lucha de los musulmanes puros contra los infieles de Occidente.
Desde el Cuerpo Nacional recuerdan que ya ha habido casos en otros países, como en Suiza, en donde sectas wahabitas organizan una especie de “policía religiosa”, cuya misión es “defender la moralidad” y castigar a los que no sean “buenos musulmanes”. Estos islamistas “patrullan” las calles y zonas de ocio, como discotecas, centros comerciales y piscinas, y atacan a aquellos que, según la visión del wahabismo, no respetan el Islam. Sus víctimas, explican las fuentes consultadas, pueden ser tanto musulmanas como occidentales.
La secta wahabita afincada en Barcelona que más preocupa a la Policía tiene, entre sus miembros, a islamistas violentos que, además de reclutar a más “fieles”, han protagonizado actos de fanatismo.
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