Como el término no suele ser de uso habitual más allá del mundo del arte, aclaremos que un trampantojo es, según definición del diccionario de Real Academia Española “trampa o ilusión con que se engaña a alguien haciéndole ver lo que no es”. Se utiliza con frecuencia cuando se carece de los medios económicos para crear una obra de arte y consiste en “una técnica pictórica que intenta engañar a la vista jugando con el entorno arquitectónico, la perspectiva, el sombreado y otros efectos ópticos de fingimiento, consiguiendo una «realidad intensificada» o «sustitución de la realidad»”.
Pues bien, diríamos que también existen, y con mucha mayor frecuencia de lo que nos imaginamos, trampantojos más allá del arte. Por ejemplo, en el mundo de la política, cuando algunos personajes públicos intentan engañarse a sí mismos o a sus compatriotas haciendo creer una realidad donde no hay sino una mera ilusión. Es exactamente lo que le está pasando al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, en relación con Marruecos con su afirmación de que el problema de la descolonización del Sáhara Occidental, ocupado ilegalmente por este último país desde finales de 1975, tiene en la legitimación de dicha ocupación, atemperada por un poco verosímil régimen de autonomía, la solución “más creíble y adecuada”.
Para que un sistema autonómico sea creíble, el Estado que lo promueve debe haberlo instaurado previamente en su propio territorio, cosa que no ha ocurrido nunca en Marruecos, donde el poder está centralizado en una monarquía teocrática que concentra los principales poderes en la figura del propio monarca y en el que alguno de su territorios con fuerte personalidad propia, como es el caso del Rif, jamás ha obtenido fórmula alguna que permita siquiera una cierta administración singularizada. Pero es que además, para que una hipotética incorporación del Sáhara Occidental a Marruecos con un régimen de autonomía fuese factible, debería requerir, como condición previa e indispensable, que sean los saharauis los que lo decidan en una consulta realizada de acuerdo con el derecho internacional y con los principios de descolonización establecidos por Naciones Unidas, algo que el gobierno de Rabat lleva décadas impidiendo hacer.
Parece que nuestro presidente del Gobierno cree que con este vergonzante reconocimiento a las tesis de Rabat asegura para España una relación amistosa y duradera con su vecino del sur y que éste, a partir de ahora, respetará la integridad territorial de nuestro país, lo que incluye, como es natural, las ciudades de Ceuta y Melilla y las aguas aledañas a Canarias, contendrá de las sucesivas oleadas de inmigración ilegal y reconocerá los derechos pesqueros y empresariales españoles. Pero es ahí donde Pedro Sánchez ha construido su propio trampantojo puesto que, habida cuenta la experiencia histórica y sobre todo la praxis más reciente, no existe garantía alguna de que Marruecos, al margen de concesiones cosméticas inmediatas, deje de chantajear a España -la debilidad de cuyos sucesivos gobiernos conoce sobradamente- con tales herramientas.
En lugar de tejer una relación sólida con Argelia, a la que nos unen tantos intereses y ningún diferendo importante, preferimos concertarnos con nuestro adversario secular vendiendo, una vez más, por treinta monedas al pueblo saharaui, transgrediendo el derecho internacional y, añadamos con absoluta sinceridad, haciendo que los ciudadanos de este país sintamos un ridículo espantoso al ver cómo nuestro presidente del Gobierno, con la manifiesta oposición del Congreso de los Diputados, máxima expresión de la soberanía nacional, acude a rendir pleitesía a un monarca extranjero que no deja de incordiarnos. Un nuevo baldón en la historia de nuestras desafortunadísimas descolonizaciones y un claro menosprecio de la dignidad de España.
De sobra entiende el presidente del gobierno Español Sr. Pedro Sanches la cuestion del Sahara Occidental y sus lazos con la Onu de solucion mediante mediante la autodetermincion del pueblo Saharaui, y su defensa de autonomia expuesta como solucion al conflicto ,primero Marruecos necesita desponer de soberania reconocida por la Onu y la comunidad internaciol, sabiendo que Marruecos nisiquira dispone de la administracion del Sahara occidenta, hecho que aun España sigue la administradora del territorio ocupado elegalmente por Marruecos. De otra parte el primer ministro Español no tiene ningunos requisitos legales de hablar o elegir a lo que no es suyo, solamente el pueblo Saharaui tiene la palabra final de elegir su destino deacuerdo con los decretos y resoluciones de la ONU los cuales Marruecos aceptô en 1991 y aun se encuentra en los TT.OO la Mision de Nacions Unidas para el Referendum en el Sahara Occidental (MINURSO)
Se [puede ya dar por seguro que E Sr Sánchez ha actuado conforme a un mal consejero, y hay personas que ya descollaron como artífices en la sombra de la indigna decisión de Sánchez de zanjar a favor de una opción que ni en forma ni en fondo tiene ninguna credibilidad. Marruecos no es un system que pueda garantizar ni cumplir ninguna de sus promesas y lo envalentona más que toda la sarta de pretensiones territoriales y políticas que hace encuentren eco en ciertos centros de interés o interesados, más en si mismo que en el resto. El Sr Sánchez no ha vacilado en violar a toda la legalidad internacional y luego pretende ser un demócrata y peor aun echa por los suelos a toda la dignidad del pueblo español, y sus representantes legítimos y no sacados de oficinas de maquinaciones. Ha demostrado un gran desprecio a los poderes españoles y al pueblo español que salio en masas para denunciar el crimen que ha cometido para apoyar a una operación como la expansionista que es lo que pasa en El Sahara Occidental. Es simplemente vergonzante y ya se sabe de los "socialistas' que se enriquecieron no sólo del poder en España si no de los favores reales re Rabat mas arde, solo que el no espero a salir del poder. Que autonomia o si quiera democracia se esperan de un régimen cuyos esbirros policiales sanguinarios acosan, atacan y violan a mujeres dentro de sus propias casas y repetidamente? Dense por seguro una cosa, Marruecos no dejara de seguir su política expansionista y anexionista en la región. Es un régimen que subsiste teniendo a sus huestes mirando hacia fuera y sus poblaciones entre el silencio y las mazmorras. El Sr Sánchez comete un crimen desmesurado no solo contra El Sahara, si no contra los enclaves del Norte de África, Las Canarias, Argelia y Mauritania y su traicionera inclinación avasallada ante Marruecos solo servirá para envalentonar al régimen de Marruecos a obrar desde lo maloo hacia lo peor. Una cosa es cierta también, la historia nunca absolverá a este "socialista" que lleva la región hacia la incertidumbre y la desestabilización. Y sera vergonzoso que se mencione su nombre en los anales del Pueblo Español.
Bravo...pensamiento compartido, basado en una realidad. La legalidad de un Pueblo...el Saharaui. Una vez más los socialistas...esos representantes del sentir social ..han vendido sus principios...por seguir chupando banco. Indignante ver políticos de esta calaña...que por cobardía venden sus principios.una vez más Pablo tu artículo es claro y conciso. No a la venta a un traidor que chantajea a un País como España
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