¿Comprar un melón o poner gasolina? Los españoles se ahogan ante la alta inflación

Este miércoles el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, alertó al Gobierno sobre la alta inflación que, según considera el republicano, "puede arrasar a ustedes, a nosotros, a cualquier Gobierno y a cualquier iniciativa de izquierdas". Rufián ilustró su discurso con dos ejemplos muy claros: actualmente un melón puede llegar a costar 13 euros, y una sandía 12 euros, cifras difíciles de asumir para alguien que cobra alrededor de 16.000 euros anuales. 

Y, aunque el republicano exagerara, no estaba tan lejos de la realidad: En Caprabo, actualmente un melón de 3,5 kilogramos cuesta 10,72 euros; en Carrefour, un melón piel de sapo de 4,5 kg vale 11,02 euros; mientras que en Día lo podemos encontrar por 9,28 euros. En cualquier caso, se trata de cifras muy elevadas que, con la inflación generalizada, pueden llevar a cualquier español a tener que escoger entre comerse una fruta o seguir pagando los gastos del día a día, como puede ser la gasolina. 

El precio medio de la gasolina y del gasóleo en España ha registrado un nuevo récord histórico este jueves y se ha consolidado por encima de los dos euros por litro; además, en ambos casos se ha 'comido' ya la totalidad de la subvención de 20 céntimos por litro que entró en vigor el pasado 1 de abril. En concreto, el precio medio del litro de gasolina se ha situado esta semana en los 2,141 euros, tras registrar una subida del 1,13% con respecto a hace siete días atrás, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea.

Ese importe medio incluye los impuestos, pero no refleja el descuento que entró en vigor desde el pasado 1 de abril de al menos 20 céntimos por litro, ya que hay descuentos superiores, dependiendo de la petrolera y de las promociones a los clientes fidelizados.

Esta subida en el precio de los combustibles se está juntando con la del coste de los alimentos. La tasa de inflación interanual escaló nueve décimas en junio, hasta el 11%, la más alta en 26 años.