Cáritas pide que las ayudas lleguen a más gente y que sea fácil solicitarlas

La ONG eclesiástica recuerda que el año pasado tan sólo el 28% de las personas en situación de pobreza severa en Cataluña eran perceptoras de la renta garantizada de ciudadanía (RGC).

|
Catalunyapressdenunciacaritasajudes

 

Catalunyapress denunciacaritasayudas
Miles de personas siguen necesitando la ayuda de Cáritas. Foto: Cáritas

 

El contexto actual (crisis post pandémica, subida de precios a nivel mundial e inflación, entre otros) castiga aún más a las personas y familias más vulnerables. Con el fin de intentar llegar a fin de mes , algo que no siempre consiguen, deben pedir ayudas, como la renta garantía de la ciudadanía (RGC) , el ingreso mínimo vital o la ayuda de 200 euros anuales que hace pocos días va anunció que ponía en marcha el gobierno español. Sin embargo, esto es insuficiente y, además, Cáritas denuncia que los trámites necesarios para acceder a ellos son pesados. La ONG eclesiástica, pues, reclama que se amplíe la cobertura de estas prestaciones y que se simplifique la burocracia para acceder a ellas

 

En un comunicado, Cáritas denuncia que el pasado año sólo el 28% de las personas en situación de pobreza severa en Catalunya, menos de un tercio, recibieron la RGC. "Llevamos tiempo reclamando que aumente la cifra de ciudadanos a la que llega, pero es complicado", explica a Catalunya Press Mercè Darnell, jefe del Programa de Necesidades Básicas de la organización. Cáritas forma parte de la comisión de la Generalitat que aborda cuestiones sociales, pero Darnell dice que "los trámites son lentos". Aunque en el 2017 se quería garantizar "unos mínimos de una vida digna para todos" Cáritas apunta que esto no se está logrando".

 

"El precio de los alimentos no para de subir, la vivienda es inasumible, las facturas.... Y aunque hay gente que recibe ayudas por parte de las instituciones, todavía nos necesitan. Estas prestaciones deben subir, porque sino muchos de ellos no llegan a fin de mes, no puede que tengan que elegir entre pagar el piso o llenar la nevera", dice Darnell.

 

LA BUROCRACIA LO COMPLICA TODO

 

La responsable de Cáritas pone el acento en la dificultad de los trámites a realizar para acceder a las ayudas. "Cuando alguien pide la renta garantizada de la ciudadanía se encuentra que le piden el ingreso mínimo vital. Hace falta tiempo y no es fácil", denuncia Darnell, quien dice que Cáritas quiere "armonizar la renta garantizada y el ingreso mínimo vital. Quisiéramos que existiera una oficina donde fuera posible realizar todos los trámites, entregar la documentación y asegurarse de que recibirán las prestaciones".

 

Catalunyapress reportcarido2
Dos voluntarios de Cáritas. Foto: Cáritas

 

A estas dos ayudas, cabe añadir la que ha aprobado el gobierno español recientemente. Sin apoyo, dice Darnell, la situación se convierte en "un infierno".

 

COBERTURA A LOS INMIGRANTES

 

Darnell incluye a los inmigrantes que no tienen permiso de residencia, pero que están empadronados en Catalunya en el grupo de población al que, considera, debería incluirse en estas coberturas sociales. "Muchos de ellos viven en habitaciones realquiladas, pagando entre 400 y 600 euros y no tienen derecho a muchas ayudas que podrían recibir. En Euskadi, por poner un ejemplo, la situación es mucho más sencilla", apunta la responsable del Programa de Necesidades Básicas.

 

Por todo ello, la delegación catalana de la ONG reclama a las administraciones "celeridad en la solución de estas necesidades para que la RGC se convierta en un instrumento real de protección social para toda la ciudadanía".

 

LA TASA DE POBREZA SUPERA EL 25%

 

Esta demanda aparece a la vez que se publican los datos del Institut d'Estadística de Catalunya (Idescat) que sitúa la tasa de riesgo de pobreza o exclusión social en Catalunya en el 25,9%.

 

La encuesta recoge las condiciones de vida en el momento de la entrevista, mientras que los ingresos, las prestaciones sociales y la intensidad en el trabajo hacen referencia al 2020. Un 32,9% de los encuestados declara no poder hacerse cargo de gastos imprevistos de 700 euros (33,4% en 2020), y un 27,8% dice no poder permitirse una semana de vacaciones al año (30,6% en 2020).

 

La privación que ha experimentado el "mayor aumento" ha sido la relativa a la capacidad de mantener la vivienda a una temperatura adecuada, 6,5 puntos porcentuales más respecto a 2020 (pasa del 9,4% en 2020 al 15,9% en 2021).

 

Asimismo, ha aumentado el número de personas que viven en hogares y afirman llegar con facilidad o con cierta facilidad a final de mes: el 57,4% de la población en 2021, mientras que era del 54,9% en 2020.

Sin comentarios

Escribe tu comentario




He leído y acepto la política de privacidad

No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
AHORA EN LA PORTADA
ECONOMÍA