El equipo de Ada Colau se carga a una ONG catalana y adjudica a Sacyr y ACS la atención domiciliaria
Dejó el asunto en manos de un personaje de Iniciativa llamado Lluis Torrens, cuyos intereses profesionales no son los más adecuados para este tipo de concursos.
Los compañeros del gobierno municipal de la alcaldesa Colau, no aciertan porque no saben. El reciente concurso de atención domiciliaria de Barcelona no ha estado exento de problemas por cómo se ha llevado y también por quiénes han sido “los agraciados”, que como no podía ser de otra manera “socialdemócrata” son dos grandes empresas españolas y españolistas: Sacyr y ACS.
Como ahora todos sabemos Valoriza y Clece respectivamente son las filiales que se han llevado el concurso en detrimento de una esforzada ONG a la que no ha servido de nada su trabajo social de años, porque a la Alcaldesa de los desahucios ese “pequeño detalle” le trae al pairo, especialmente, porque dejó el asunto en manos de un personaje de Iniciativa llamado Lluis Torrens cuyos intereses profesionales no son los más adecuados para este tipo de concursos.
Por si esto fuera poco argumento, a medida que este diario ha profundizado en el tema, se van conociendo detalles incomprensibles que entendemos que los barceloneses deben saber. Por ejemplo: la empresa Clece, que nació como empresa de limpieza -campo que sigue desarrollando todavía- ha tenido graves problemas con sus trabajadoras por el bajo salario que perciben las mismas y en estos días se habla, incluso, de una posible huelga por motivos relacionados con las relaciones laborales.
Las dos empresas de servicios agraciadas por el concurso se harán cargo de dos de las cuatro zonas que se licitaban. Y tal y como les señalábamos, esta decisión ha dejado fuera a la que hasta ahora prestaba ese servicio, la ONG Asociación de Bienestar y Desarrollo, ABD, organización muy especializada en dar respuesta rápida a situaciones de vulnerabilidad social.
La valoración de las propuestas, por parte del Gobierno Colau, ha primado más la parte económica que la técnica, curiosa situación en un ayuntamiento que dice velar por las personas. Los expertos que entienden de este tipo de concurso públicos han destacado a CatalunyaPress que no entienden que se prime más la parte económica que la técnica ya que este tipo de servicios municipales deberían prestarlos las entidades sociales que están más cerca de la problemática y tienen un mayor conocimiento de las mismas, y no las grandes empresas que solo miran el dividendo de sus accionistas y no el interés público. Por si esto fuera poco, es incomprensible que una ONG catalana sea desplazada de un concurso público por dos grandes empresas con sede en Madrid porque quien preside el concurso es “un viejo conocido” de la política catalana especialista en cargos públicos bien remunerados de la mano de un partido, que se supone es heredero directo del PSUC y que ahora se llama Iniciativa.
¿QUIÉN ES LLUIS TORRENS?
Lo grave del asunto es que el área responsable de tan desdichada decisión es competencia de la muy sobrada Laia Ortiz, segunda teniente de alcalde por ICV y persona de máxima confianza de Ada Colau, y el ejecutor directo del concurso es su mano derecha y Director de Planificación e Innovación del área de Derechos Sociales, Lluis Torrens, cuyo lema que hemos recogido de su cuenta de Linkedin es: “Mi trabajo es acabar con la pobreza en Barcelona”, toda una declaración de principios que en la práctica se ha traducido en fulminar a una ONG que precisamente lucha por erradicar esta lacra social en la ciudad. Una pelea desigual en la que por supuesto no participan ni se les espera Sacyr y la ACS de Florentino Pérez.
Lluis Torrens, militante de ICV, tiene un amplio recorrido en la Administración y la docencia. Ha sido gerente del ayuntamiento de Molins, profesor en IESE Business School, Director de Serveis, Director de Interior, Relac Institucionals i Participación en la Generalitat de Catalunya. Un brillante currículo que enseña orgulloso en las redes sociales donde sí omite todo lo relacionado con su etapa en el Departamento de Salud, como adjunto a la Secretaria General Marta Segura conocida en el sector como “la piadosa” en una Consellería de Salut en la que estaba al frente Marina Geli, mientras Carles Manté, su valido sociovergente hacía y deshacía a su antojo como luego hemos sabido por el caso Innova, por el que ahora está imputado.
A su salida del departamento, Lluis Torrens volvió a la docencia y, junto a Marta Segura, constituyeron una empresa denominada Learning by Doing S.L., cuyo objetivo social es la consultoría en innovación estratégica y operativa para administraciones públicas. Planes de racionalización y eficiencia que compatibilizó con su faceta docente. Las causas benéficas que le importan a Learning, como se puede comprobar fácilmente, son los negocios que sus socios pueden llegar a conseguir de los contratos que reciban. Un dato que ha sabido ocultar a su jefa Laia Ortiz y que demuestra que estamos ante un nuevo caso de camuflaje laboral, cuyo mejor representante en esta etapa Colau es el inefable ex convergente Joan Pinyol, quien ha consagrado toda su estrategia en enemistar a las grandes empresas catalanas con la entidad metropolitana como si se tratara de un líder antisistema y militara en la CUP.
Escribe tu comentario