Encuentran restos de plástico en croquetas congeladas del Bonpreu vendidas en Cataluña

El Departamento de Salud del País Vasco ha emitido una alerta relacionada con la posible contaminación por fragmentos de plástico en ciertos lotes de croquetas congeladas de setas, comercializadas bajo las marcas Eroski, Bonpreu y Alteza en Cataluña y El País Vasco. Esta advertencia surge tras la comunicación recibida de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), lo que ha llevado a las autoridades a tomar medidas inmediatas.

La recomendación del Departamento de Salud es clara: se insta a los consumidores que tengan en su hogar cualquiera de estos productos a no consumirlos, mientras que la empresa fabricante procede a retirarlos del mercado de manera preventiva.

Los productos afectados incluyen las "Croquetes de ceps de la marca Bonpreu" en los lotes 40111 (con fecha de consumo preferente dic-25), 31122 (con fecha de consumo preferente oct-25) y 40124 (con fecha de consumo preferente dic-25). Además, las "Croquetas de setas boletus edulis" de la marca Alteza en el lote 31108 (con fecha de consumo preferente abril-25), y las "Croquetas de boletus edulis" de la marca Eroski en los lotes 30610 (con fecha de consumo preferente nov-24) y 31122 (con fecha de consumo preferente abril-25).

La Agencia Española de Seguridad Alimentaria ha trasladado esta información a las autoridades autonómicas mediante el Sistema Coordinado de Intercambio Rápido de Información, con el objetivo de garantizar la retirada oportuna de los productos afectados de los canales de comercialización.

Esta alerta resalta la importancia de la vigilancia continua y la colaboración entre las autoridades sanitarias y las empresas para garantizar la seguridad alimentaria y la protección de los consumidores. Se recomienda a cualquier persona que tenga estos productos en su posesión abstenerse de consumirlos y seguir las indicaciones de las autoridades sanitarias locales.

¿Qué puede pasar al ingerir plásticos?

La ingesta de plásticos puede tener graves consecuencias para la salud humana. Los fragmentos de plástico pueden liberar sustancias químicas tóxicas que, una vez dentro del cuerpo, pueden causar daño a los órganos y sistemas. Además, los plásticos pueden actuar como vectores para la transferencia de contaminantes ambientales y microorganismos patógenos. A largo plazo, la exposición a estos contaminantes puede aumentar el riesgo de enfermedades crónicas, como trastornos endocrinos, cáncer, problemas reproductivos y daños en el sistema inmunológico. Por lo tanto, es crucial evitar la ingestión de plásticos para proteger la salud.