Más de 37.000 niños (7.000 con beca) comienzan un verano inolvidable con la Fundació Pere Tarrés

El verano en los esplais de Pere Tarrés no solo es sinónimo de ocio, sino también de educación y socialización. Con una apuesta clara por el desarrollo integral de niños, niñas y adolescentes, la fundación vuelve a activar su campaña de becas, que este año podrá beneficiar a cerca de 7.000 menores con dificultades económicas, facilitando así su acceso a estas actividades.

Estas iniciativas, que se extienden por toda la geografía catalana, buscan fomentar valores como la convivencia, la inclusión y el aprendizaje fuera del entorno escolar tradicional. Sin embargo, su fuerte vinculación con el Moviment de Centres d’Esplai Cristians Catalans genera un debate latente sobre el papel de la religión en la educación no formal y el uso de fondos públicos para actividades gestionadas por entidades confesionales.

Mientras las familias celebran la reapertura de espacios de encuentro y crecimiento personal para sus hijos durante los meses de verano, expertos y sectores críticos cuestionan el modelo, exigiendo mayor transparencia y control en la gestión de estas actividades y sus líneas pedagógicas.

En definitiva, la Fundació Pere Tarrés vuelve a posicionarse como un actor fundamental en el panorama educativo estival, aunque no sin levantar polémicas en torno a su identidad, financiación y alcance social. El debate está servido mientras los niños empiezan a disfrutar de un verano repleto de actividades.