Desmantelan dos mafias serbias con 13 detenidos, incluidos arrestos realizados en Barcelona y Valencia
Es una operación de Policía Nacional, Mossos y autoridades serbias, coordinados por Europol.
Una operación internacional de gran envergadura permite desarticular dos organizaciones criminales asentadas en Serbia y vinculadas al clan Vracarci, un grupo con historial de asesinatos, ataques con explosivos y tráfico de drogas a gran escala. La intervención, coordinada por Europol, moviliza a agentes de Mossos d’Esquadra, Policía Nacional y autoridades serbias, con una estrategia sincronizada que abarca varios países. En total, se detienen 13 personas: dos en España (Barcelona y Valencia), diez en Serbia y una en Dubái (Emiratos Árabes Unidos). Además, se realizan 22 registros en Serbia con incautaciones que superan los 300.000 euros en efectivo, coches de lujo, relojes de alta gama y teléfonos encriptados.
“Se ha llevado a cabo una operación compleja que demuestra la eficacia de la cooperación internacional contra el crimen organizado”, explican los Mossos en su comunicado.
Coordinación internacional y despliegue estratégico
El operativo combina inteligencia local y coordinación europea. El Área Central de Crimen Organizado de los Mossos lidera la fase de explotación en Barcelona y desplaza efectivos a Valencia y Serbia para garantizar la ejecución de arrestos y registros simultáneos. Europol actúa como eje de coordinación entre los distintos cuerpos implicados, asegurando el flujo de información y la sincronización de la operación.
El despliegue demuestra que las redes criminales transnacionales pueden ser neutralizadas mediante cooperación internacional y planificación detallada, incluso cuando operan en múltiples países con estrategias sofisticadas y comunicación cifrada.
Primer grupo: asesinato, explosivos y cocaína en Europa
El primer grupo desmantelado está acusado de delitos de organización criminal, un asesinato en 2018 y tres intentos de asesinato en 2020 contra miembros de bandas rivales. A esto se suman tres ataques con explosivos a locales de restauración y a un negocio de lavado de vehículos, además de la introducción de cocaína en varios países europeos.
“Los miembros de esta estructura operaban con total impunidad hasta ahora, pero las investigaciones han permitido neutralizar su red”, añade la nota oficial.
El impacto de esta red no se limita al tráfico de drogas: sus acciones violentas, incluyendo asesinatos y atentados con artefactos explosivos, generaban un clima de intimidación y miedo en varias ciudades, afectando a negocios y comunidades locales.
Segundo grupo: asesinato y tráfico a gran escala
El segundo grupo investigado está implicado en otro asesinato ocurrido en 2020 y en tráfico de cocaína “a gran escala”. Las autoridades serbias presentan cargos contra 28 personas, algunas de las cuales ya estaban en prisión preventiva, mientras que un pequeño grupo sigue fugado.
“La colaboración entre diferentes países ha sido clave para desarticular redes que operaban más allá de Serbia”, subrayan los investigadores.
Esta organización controlaba rutas de tráfico internacional, utilizando métodos sofisticados para mover drogas y dinero en efectivo entre varios países europeos, manteniendo una red de comunicación encriptada que dificultaba su detección. La operación demuestra que, a pesar de su estructura compleja y sus contactos internacionales, estas mafias no están por encima de la ley.
Detalles de la operación en España
Los Mossos d’Esquadra lideran la fase de explotación en Barcelona y desplazan efectivos a Valencia, donde se detienen dos personas en territorio español. La acción incluye revisiones de domicilios, vehículos y oficinas, asegurando pruebas clave para imputaciones futuras.
“Cada arresto en Barcelona y Valencia refleja la importancia de la coordinación internacional para combatir el crimen organizado que opera de forma transnacional”, destacan las autoridades.
Además de las detenciones, los registros permiten incautar bienes de alto valor, como coches de lujo y relojes, además de dispositivos electrónicos cifrados que los criminales utilizaban para coordinarse y evitar la detección policial.
Impacto económico y social
La operación no solo reduce la capacidad operativa de los grupos desarticulados, sino que también envía un mensaje a otras organizaciones criminales sobre la eficacia de la cooperación internacional. La eliminación de estas redes violentas y del tráfico de drogas a gran escala tiene un impacto directo en la seguridad de las ciudades afectadas, protegiendo a la ciudadanía de asesinatos, ataques con explosivos y actividades ilícitas.
“El éxito de este operativo refleja que el crimen organizado, por muy sofisticado que sea, no está por encima de la ley ni de la coordinación internacional”, concluyen los responsables policiales.
Próximos pasos y seguimiento
Las investigaciones continúan para localizar a los miembros fugados y recopilar pruebas adicionales que permitan imputar a otros integrantes de estas redes. Las autoridades también analizan la documentación incautada, incluyendo comunicaciones cifradas, que podrían revelar nuevas operaciones de tráfico y vínculos con otros clanes criminales en Europa y Oriente Medio.
La operación destaca la importancia de la cooperación policial transnacional, mostrando que la combinación de inteligencia local, coordinación europea y despliegue estratégico permite desmantelar organizaciones criminales complejas y peligrosas.
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