Al menos 12 muertos y 50 heridos en un espectacular incendio en un edificio de Londres
El edificio de 27 plantas ha empezado a arder esta madrugada, y se espera que el número de muertos aumente porque se está accediendo a las casas | Cerca de 200 bomberos y 40 camiones antiincendio han acudido al lugar de los hechos.
La Policía Metropolitana (Met) ha confirmado que al menos hay doce muertos en el edificio de 27 plantas en el oeste de la ciudad, en las cercanías de Notting Hill que ha empezado a arder entre la 01.15 y las 02.00 horas en España.
El incendio podría haber empezado en la segunda planta y se ha extendido ya por todo el edificio. En el momento de los hechos había varias personas en el interior de las viviendas y se calcula que ya habría unos 50 heridos, trasladados a cinco hospitales de la capital británica.
Los bomberos de Londres aseguran que “estamos luchando con un incendio realmente grave que se extendió por todo el edificio”. “Los efectivos están haciendo todo lo posible para enfrentar este fuego”, agregó uno de los responsables de controlar las llamas.
Hasta el lugar también se han desplazado 20 ambulancias ya que aún podrían encontrarse personas en alguno de los 120 apartamentos de la Torre Grenfell en el Lancaster West Estate. De hecho, varios testigos han confesado que se ven luces de lintera y de móviles en el interior.
En declaraciones a la BBC uno de los afectados ha confesado que “el edificio se está desmoronando, solo hay humo negro”.
El desmoronamiento del edificio podría tener graves consecuencias también en los edificios de alrededor, por eso los agentes están ordenando el desalojo de las viviendas que se encuentran en los alrededores de Lancaster West Estate.
Los residentes que han podido escapar de las llamas aseguran que las alarmas antiincendios no han sonado en ningún momento y muchos se han dado cuenta de lo que estaba pasando por el olor a humo y por los gritos que procedían de las distintas plantas por donde se extendieron las llamas.
Algunos de los afectados han podido ser ya evacuados a un centro cristiano de los alrededores y lamentan que han perdido todo lo que tenían dentro aunque dan gracias por estar vivos. Eso sí, también lamentan la falta de coordinación por parte de los autoridades.
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