El imán de Ripoll, salafista radical, tuvo relación con implicados en el atentado de Atocha

Los Mossos están investigando si el imán de Ripoll, Abdelbaqi Es Sattii puede haber actuado de líder del grupo en los atentados de este jueves en Barcelona y Cambrils. Algunas fuentes desvelan que también tuvo contacto con detenidos implicados en el atentado de Atocha de 2004.

Según fuentes próximas al operativo, este individuo, de 45 años de edad, es un salafista radical y, por edad y perfil, podría haber actuado de líder del grupo terrorista, formado por 12 personas, de los que cinco murieron en el ataque de Cambrils.

Abdelbaki Es Satty cumplió cuatro años de prisión en la cárcel de Castellón por tráfico de hachís, según han informado fuentes de la investigación que han precisado que fue condenado en 2010 y que cumplió condena en 2014, fecha en la que fue puesto en libertad.

El sospechoso de estar detrás de los últimos ataques terroristas en Catalunya fue sorprendido en 2010 en un ferri entre Ceuta y Algeciras con un cargamento de hachís, que finalizó con su condena por tráfico de drogas.

Por otro lado, según informaciones del diario 'El País', el imán de Ripoll mantuvo contacto con algunos de los terroristas detenidos tras el atentado en los trenes de Atocha el 11M de 2004.

Los Mossos han registrado durante varias horas la madrugada de este sábado el piso del imán en Ripoll en busca de pistas y pruebas de ADN para saber si este podría ser uno de los muertos en la explosión de la casa de Alcanar (Tarragona) del miércoles.

Según ha contado su compañero de piso, situado en un sexto del número cuatro de la calle Sant Pere de Ripoll, abandonó su domicilio el martes “porque se iba a Marruecos” y no ha vuelto a saber nada de él. Las familias de los terroristas abatidos en Cambrils también señalan el imán como instigador de los hechos aprovechando su juventud.

En Ripoll, la policía catalana ha realizado hasta ahora un total de nueve registros a raíz de los atentados, donde residían algunos de los presuntos terroristas.

La operación sigue abierta, ya que sigue en busca y captura Younes Abouyaaqoub, miembro de la célula, y está por concretar su papel --si fue conductor de la furgoneta--, a lo que se suma la identificación del imán.