Aunque la investigación por el asalto a la casa de María del Monte e Inmaculada Casal en la madrugada del 25 de agosto de 2023 se ha prolongado durante varios meses, el juez ha concluido la fase de instrucción y ha dictado un auto de procesamiento. En él, señala a Antonio Tejado como “autor intelectual” del delito, imputándole cuatro cargos y confirmando que el sobrino de la artista se sentará en el banquillo junto a los otros diez miembros de la banda liderada por el ciudadano ruso Arseny Garibyan. Tejado se enfrenta ahora a una posible pena superior a los 5 años de prisión.
El juez Juan Gutiérrez Casillas imputa a 9 de los investigados —entre ellos, el ex de Chayo Mohedano— delitos de robo con violencia e intimidación en domicilio habitado, uso de instrumentos peligrosos, pertenencia a organización criminal, detención ilegal y lesiones. El auto es contundente al señalar que Tejado habría actuado en connivencia con el resto del grupo, facilitándoles el acceso al inmueble por la puerta trasera sin causar daños visibles, y avisándoles del momento en que la propietaria se encontraba dentro para que, bajo coacción, abriera la caja fuerte.
Según el documento judicial, Tejado habría compartido información clave con los asaltantes para que pudieran entrar sin dificultad y ejecutar el robo, lo que lo sitúa como uno de los cerebros del golpe, junto con Garibyan. La instrucción también recoge que las cinco víctimas —la cantante, su esposa, la hija de Inma Casal, el yerno de esta y una empleada del hogar— fueron sometidas a un violento asalto con uso excesivo de fuerza, generando una situación de grave peligro para su integridad física y causándoles un profundo estado de ansiedad y temor.
La Fiscalía y la acusación particular —ejercida por María del Monte y su pareja— disponen ahora de un plazo de diez días para solicitar la apertura de juicio oral y formalizar la acusación contra Tejado y el resto de implicados.
Este nuevo revés judicial ha golpeado duramente al sobrino de la artista, quien este miércoles acudió a los Juzgados de Sevilla para cumplir con su cita quincenal de firma, como parte de las medidas impuestas tras obtener la libertad provisional hace un año. Visiblemente serio, tenso y sin ocultar su nerviosismo —posiblemente consciente de que tendrá que sentarse en el banquillo acusado de delitos que podrían llevarlo de nuevo a prisión—, Antonio Tejado evitó hacer declaraciones a Europa Press y no quiso pronunciarse sobre el proceso judicial ni sobre su confianza en la Justicia.
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