Él y el piloto Dsvid Ibbotson viajaban en un vuelo sin licencia con destino a Gales, lugar donde se juzgó el caso y fue sentenciado el pasado mes de octubre, cuando el responsable del vuelo, David Henderson, de 67 años, fue declarado culpable de "poner en peligro la seguridad de la aeronave" según el Tribunal de la Corona de Cardiff.