Con Manolo Vázquez Montalbán viví dos momentos trascendentes; su cumpleaños 60, celebrado con todo la pompa del mundo editorial e intelectual de la época, en su bella casa de Vallvidriera, y la visita de urgencia que le hicimos Carmen Balcells y yo a la sala de terapia intensiva del 'Clínic', cuando tuvieron que desobstruirle una arteria coronaria.