Los policías de Valls trabajan en instalaciones "tercermundistas"
La Inspección de Trabajo ha ratificado las malas condiciones del entorno de trabajo de los agentes que llevan desde 2015 denunciando su situación.
Comisaría de la Policía Local de Valls.
El Sindicato Autónomo de Policía de las Policías Locales de Catalunya (SAP-PL) denuncia la malas condiciones de trabajo de las agentes de la comisaría de la Policía Local de Valls desde 2015.
Los agentes llevan dos años denunciando la mala situación de las instalaciones de trabajo, e incluso remitieron al alcalde de la localidad una propuesta de actuación en prevención de riesgos laborales, pero desde entonces no se han producido cambios.
Así, han tenido que lidiar con plagas de garrapatas, lavabos en malas condiciones, y un comedor en el que ni si quiera disponen de fregadero.
El sindicato policial remitió en dos ocasiones un informe de Seguridad y Salud al consistorio, al que ha tenido acceso Catalunyapress, para informar de las deficiencias de la comisaría, y no se tomó ninguna medida para mejorar las instalaciones de trabajo.
Parte del informe de seguridad y salud remitido al consistorio.
Después de haber intentado durante este tiempo encontrar solución a esta situación con los responsables correspondientes y no haber obtenido respuesta ni reacción, la Inspección de Trabajo ha ratificado con un informe, emitido el pasado 5 de febrero, la necesidad de reformar las instalaciones, después de que el sindicato presentase un expediente ante la "inmobilidad" de los responsables políticos de la localidad.
Parte del informe de seguridad y salud remitido al consistorio.
Por ello, desde el sindicato celebran que después de dos años pidiendo una mejora de las instalaciones en que trabajan, la inspección les haya dado la razón y haya emitido un informe en el que insta a mejorar el lugar en que los agentes desempeñan su labor.
Fuentes sindicales indican que se producirá un traslado a unas nuevas instalaciones y que, mientras tanto, se acometarán algunas reformas en la actual sede, después de dos años reclamándolas.
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