Torra carga a la Diputación de Barcelona el gasto de casi un millón de euros de su viaje a Washington

 

Quim Torra y Laura Borràs el pasado jueves en Washington (Europa Press)

Quim Torra ha inaugurado su actividad internacional como presidente de la Generalitat cumpliendo con la cita que en su momento preparó Santi Vila desde la Consejería de Cultura de participar como cultura invitada en el Smithsonian Folkie Festival, en Washington. No obstante, el grueso del gasto ha recaído en el presupuesto de las diputaciones catalanas y, en mayor medida, lo ha pagado la Diputación de Barcelona.

Así, la Diputación de Barcelona habría pagado 700.000 euros, cifra que no incluye los gastos de cobertura de la XAL, Xarxa Audiovisual Local dependiente del ente supramunicipal. El portavoz del PP en la Diputación de Barcelona, Ramon Riera, califica de “propagandística” la participación de la Generalitat en el festival americano. Para Riera “es incomprensible que la Diputación se gaste tanto dinero en algo que es competencia autonómica y que no tiene ninguna vinculación con las competencias municipales en materia de cultura”.

“Las diputaciones catalanas –añade--, y en particular la de Barcelona, van a gastarse un millón de euros en apoyar la utilización de la cultura popular tradicional de Cataluña como excusa para que el presidente de la Generalitat haga el ridículo en Washington”. Riera advierte de que el Smithsonian Folklife Festival se ha convertido en un una excusa para llevar a Estados Unidos “a apóstoles del separatismo con todos los gastos pagados”.

Toda la administración independentista se ha volcado en este primer viaje institucional, cuyo coste forma parte de un programa cultural que podría superar los dos millones de euros, cofinanciados por el Govern y las cuatro diputaciones provinciales.

LOS HOMBRES DE PUIGDEMONT

Como es natural, Quim Torra viajó a Washington arropado por la Consejería de Cultura encabezada por Laura Borràs, para participar en la inauguración del Smithsonian Folkie Festival, donde Cataluña participa como cultura invitada. Un evento planificado hace dos años por el exconsejero de Cultura Santi Vila y que estaba concebido para que fuera Puigdemont quien acudiera a ese festival. Finalmente, ha sido Quim Torra el protagonista del viaje y quien ha convertido esta cita cultural en un show mediático que ha incomodado a los organizadores catalanes.

Pero tampoco los integrantes de la comitiva del Govern cuadran exactamente con las intenciones iniciales del viaje. Según revela este sábado el periódico digital ‘Crónica Global’ existe cierto malestar en el Govern por la presencia del vicepresidente del Parlamento catalán, Josep Costa, y del diputado de JxCat Francesc de Dalmases.

El primero sonó durante días como presidenciable en sustitución de Puigdemont. El segundo está implicado en una supuesta trama de malversación de fondos públicos mediante la concesión de ayudas de CDC a la cooperación. 

Asimismo, también ha formado parte de la comitiva Josep Lluís Alay, el historiador que fue detenido junto a Puigdemont en Alemania y que ha sido fichado recientemente por el Govern como coordinador de las políticas internacionales de la Presidencia.